pamplona - Nauzet Pérez, portero de Osasuna, lleva apenas un par de meses en Pamplona, pero en ese tiempo ha conseguido ganarse el cariño de la grada y está encantado con su nueva ciudad, a pesar de provenir de un lugar con playa y buen tiempo, las Islas Canarias.
Cecilio Nauzet no es un nombre muy común, ¿de dónde viene?
-Cecilio apenas lo utilizo, viene porque por un error, mi padre tenía un nombre diferente en el registro civil y en el bautizo por lo que se tuvo que quedar con uno de los dos. Eligió quedarse con Sebastián y a mi me dejó el feo, Cecilio (risas). Nauzet es un nombre guanche, que viene de nuestros antepasados canarios.
¿Qué es lo que más echa de menos de sus Islas Canarias natales?
-Me gusta mucho la pesca y muchos deportes relacionados con el mar y creo que es una de las cosas que más echo en falta, aunque ya estoy acostumbrado porque llevo mucho tiempo fuera.
En su carrera tuvo una época en la que jugó en Suecia, ¿qué recuerda de su estancia allí?
-Al principio la aclimatación fue dura tanto para mí como para mi mujer, y cuando ya estábamos bien nos tuvimos que volver por la enfermedad de un familiar.
¿Era muy diferente el estilo de vida y de las personas en Suiza?
-Sí, era una manera de vivir muy diferente, apenas se hace vida en la calle, se pasa mucho tiempo en casa. La gente es algo más cerrada que aquí, pero el tiempo que estuvimos nos trataron muy bien y no tengo quejas.
Viniendo de un lugar con tanta pasión por el fútbol, ¿cómo se vivía allí este deporte?
-Es algo diferente, porque hay deportes más fuertes como el hockey o el ski, pero el fútbol también tiene sus seguidores. Jugué en el equipo de una ciudad pequeña, pero teníamos mucho apoyo.
¿Hubo tiempo para visitar lugares emblemáticos suecos?
-Teníamos cerca Goteborg, Malmo y visitamos Estocolmo. Visitamos todo lo que pudimos de allí pensando que íbamos a estar más tiempo ya que me quedaba contrato, pero por circunstancias de la vida no pude cumplirlo.
¿Un jugador que ha estado en tantos equipo se acostumbra a vivir lejos de casa?
-Te vas haciendo a tu rutina, sabes que tienes la familia lejos, pero mi mujer y yo nos apoyamos mucho, lo hemos sabido llevar y ojalá siga así muchos años más.
¿Cómo mantiene el contacto con ellos?
-Ahora es más sencillo porque con WhatsApp, las redes sociales y demás puedes hablar con ellos con frecuencia. Además aprovechamos las épocas de navidad y verano para estar lo más cerca posible de ellos.
Cuando llegó a Pamplona comentó que conocía a la afición de Osasuna, ¿cómo se ve esa afición desde fuera?
-La verdad es que es algo espectacular, a mí me impresionó el día que fueron a Sabadell. Siempre se habla de las aficiones de los equipos y la de Osasuna tiene un lugar especial porque siempre apoya al equipo aunque vaya mal y en ese sentido estoy encantado.
¿Conocía algo de Pamplona antes de venir?
-Muy poca cosa, las fiestas de aquí y poca cosa más. Poco a poco estamos intentando conocer no solo Pamplona, sino también toda Navarra.
¿Ha venido alguna vez a San Fermín o lo conoce por la televisión?
-No he podido venir a disfrutarlo, pero creo que es una fiesta que hay que ver alguna vez en la vida, habrá tiempo de poder vivirla.
¿Le ha sorprendido algo desde que llegó?
-Me esperaba un trato de la gente muy amable, estuve en Miranda de Ebro y creo que el carácter no es muy diferente, la gente siempre te intenta ayudar. Me ha sorprendido algo más el club porque me decían que tiene muchos problemas y hasta ahora no he visto esos problemas. Quizá sea algo que se ve desde fuera o que tiene que ver con gente que no está en el club porque en el día a día a nosotros nos tratan muy bien y sin problema.
Un hombre de tanta playa y mar, ¿cómo lleva vivir en Pamplona?
-La verdad es que llevo varios años fuera y me he acostumbrado, soy una persona que se adapta rápido a los diferentes sitios. Además, me gusta el campo y salir a pasear con los perros, por lo que estoy a gusto aquí.
Después de su paso por Miranda de Ebro, ahora en Pamplona, ¿ha notado ese carácter del norte?
-No creo que las personas del norte sean cerradas, lo que si es cierto es que tratan a los futbolistas como personas normales, en otros lugares quizá se tiende a pensar de otra manera y eso no es bueno. Lo mejor es llevar las cosas lo más normal posible, sabiéndo que las cosas pueden ir bien o mal, pero que los jugadores siempre intentamos dar todo lo posible por el equipo.
¿Cómo fue su llegada al vestuario?
-Sabía los jugadores que formaban el vestuario de Osasuna porque me había enfrentado a ellos. Es un vestuario muy joven, en el que al principio había gente muy tímida, pero se está viendo que somos un grupo muy unido y sin importar la edad que tengan tienen su peso en el equipo, y la verdad es que los más jóvenes te dan alegrías cada mañana y también se apoyan en los que somos más experimentados.
¿Le tocó recibir alguna broma en su llegada?
-Hay bromas todas las mañanas, a mí no me tocó una en especial, pero todas las mañanas las hay y creo que es algo bueno porque es un vestuario muy sano.
Con gente tan joven, ¿hace de padrino de alguno?
-La verdad es que los más jóvenes siempre te tiran un poco más, pero tengo muy buen rollo con todos. Son chicos muy nobles que trabajan mucho y estoy muy sorprendido por cómo compiten.
¿Qué sensación ha tenido en sus primeros partidos en El Sadar?
-Desde el partido de pretemporada contra el Athletic vi que había buen ambiente y en el primer encuentro de Liga ya noté ese ambiente especial, con la gente muy encima, apoyando al equipo. Es un plus que tenemos que aprovechar, nos tenemos que hacer fuertes en casa. Además, el campo a la gente de fuera le suele impresionar, a mí el año pasado cuando vine a jugar me sorprendió y debemos aprovecharlo.
¿Qué le diría a esas personas que viajan y les apoyan incluso en los partidos fuera de casa?
-Que aunque en algunas ocasiones nosotros no podamos expresarlo en palabras, tratamos de hacerlo en el campo porque nos dan mucho y quizá las victorias no serían tantas si no fuese por ellos.
Una vez terminados los entrenamientos, los partidos, ¿qué le gusta hacer en su tiempo libre?
-No soy mucho de salir de fiesta, soy más de estar en casa. Cuando hay fútbol lo intento ver y sino estoy con mi mujer o con mis perros. Además, me gusta ir por la ciudad con ella de pintxos, intentamos aprovechar el tiempo libre en pareja.
Una persona que viaja tanto, ¿cómo lleva su vida y cómo lo lleva su pareja?
-Cuando empezamos hace muchos años lo pasaba peor, pero con el tiempo se ha ido acostumbrando. En la época en la que vivíamos en las Islas era más complicado porque los viajes eran más largos, pero ahora son más cortos y lo llevamos mejor.
¿Qué tipo de música acompaña sus viajes?
-Ahora poca música porque jugamos a la pocha y no escucho mucha. Cuando escucho suele ser música en castellano como El Canto del Loco o Melendi.
Y cuando se encuentra en casa, ¿qué no puede faltar en ella?
-La compañía de mi mujer, es algo que valoro mucho.
¿Y qué no soporta que haya en su casa?
-El desorden. La verdad es que soy una persona muy ordenada, los dos somos un poco diferentes en ese sentido y las discusiones suelen venir por ese tema.
¿Ha probado la gastronomía navarra? ¿Tiene algún plato especial?
-No he probado mucho, pero sí he notado que la carne aquí es muy buena, soy muy de carne roja y lo agradezco.
¿Qué capricho echa de menos de Canarias?
-El mojo, no lo echo de menos porque lo hacemos mucho en casa. Las patatas que tenemos allí no están aquí, pero hemos encontrado algunas similares. No lo echo de menos porque puedo comerlo aquí, pero es una de las cosas principales de allí.
¿Se defiende en los fogones o no es su mejor arte?
-No tengo mucho problema porque tenemos termomix (risas).
Es una persona que lleva muchos tatuajes, ¿por estética o tienen algún significado especial?
-Es un tema del que no suelo hablar a menudo. Cada tatuaje tiene un significado especial, su porqué, el momento en el que me lo hice, refleja algo de mi vida. Son cosas en las que me siento reflejado y me guardo para mí, incluso en los encuentros los llevo tapados.
¿Tiene alguno especial?
-Cada uno tiene su momento especial y su significado, son momentos de mi vida y experiencias que he vivido.
¿Se arrepiente de haberse hecho alguno o incluso se haría más?
-Hay algún tatuaje que llevo tapado porque tengo encima otro, pero no me arrepiento y con el tiempo seguro que tengo que hacerme alguno más por algo que me haya pasado. Soy mucho de reflejar en mi cuerpo lo que me ocurre en la vida.
Habla muy bien de sus mascotas, ¿le gustan los animales?
-Sí, me encantan.
¿Qué mascotas tiene?
-Tenemos tres perros: Kira, Noa y África.
¿Los tiene muy mimados?
-Sí, creo que demasiado.
¿Cómo se manejan con los viajes para cuidarlos?
-Están la mayor parte del tiempo con mi mujer. Cuando ella no está o nos marchamos los dos en algún día libre, buscamos una guardería y cuando visitamos Canarias nos los llevamos porque están acostumbrados a los viajes casi tanto como nosotros.
Es amante del cine, ¿cuál es su género favorito?
-Me gustan mucho las películas de acción, pero cualquier buena película me gusta sin importar mucho el género. Mi mujer tiene un gusto diferente al mío, así que tenemos que negociar para ir eligiendo la película.
¿Es más de cine o de ver películas en casa?
-Me gusta mucho ir al cine y si una película es buena prefiero ir a verla al cine, aunque luego la vea un par de veces más en casa, porque soy mucho de verlas de nuevo.
¿Una escena en la que le hubiese gustado ser protagonista?
-Hay muchas, pero creo que alguna de Troya o de alguna película de acción. Me gustaría participar en alguna de ellas.
Además, ¿ve mucho la televisión?
-Suelo ver fútbol siempre que puedo, ahora es muy sencillo porque casi todos los días hay partidos. Los días que no los hay suelo ver documentales tanto en televisión como por Internet.
Hace una semana comenzó Gran Hermano, ¿se ha comentado algo en el vestuario?
-Sí, me he enterado de que dos chicas de Pamplona han entrado en la casa y ha habido algunas bromas, aunque no estoy muy puesto en el tema.
¿Tiene alguna manía en especial?
-El orden sobre todo. Antes de jugar sigo unas rutinas por costumbre. Antes sí que era maniático, pero con el tiempo me he liberado.
Con el 13 en la camiseta, ¿es una persona supersticiosa?
-Sí lo soy, porque si no lo llevo me siento mal. Tiene que ver con que debuté con el número 31, es el 13 al revés; nací el día uno de marzo (1/3)... Soy muy de pensar en esas cosas y decidí que el número 13 era mi numero.
¿Qué es imprescindible cuando sale de casa?
-Si va a ser para más de un día, un cepillo de dientes siempre.
Un deseo personal y grupal para este año.
Ante todo deseo que tengamos las menos lesiones posibles y que todo siga como hasta ahora, con el buen trabajo diario. Que todos los días nos despertemos con ganas de venir a trabajar porque así seguro que nos irán las cosas bien.