El expresidente de Estados Unidos Donald Trump ha pedido la devolución de varias peticiones de clemencia y documentos sobre su política migratoria durante su estancia en la Casa Blanca que le fueron incautados por el FBI durante su operación en su finca de Mar-a-Lago (Florida).

En un documento recibido por el perito especial que supervisa las incautaciones, el juez Raymond Dearie, los abogados de Trump aseguran que los nueve documentos que comprenden las peticiones de clemencia y sus iniciativas migratorias, ahora mismo en manos de las autoridades federales, son "propiedad personal" del ex mandatario y, por lo tanto, no pueden ser apropiados por las agencias de seguridad.

El pasado 8 de agosto, un grupo de agentes del FBI irrumpieron en la lujosa mansión del expresidente Trump en Palm Beach, Florida, llevándose alrededor de veinte cajas repletas de carpetas con documentación clasificada, algunas de ellas con la etiqueta de alto secreto.

Entre los documentos que recogieron los agentes del FBI durante la redada a la residencia de Mar-a-Lago, se han encontrado algunos archivos confidenciales que incluso describirían las defensas militares de un Gobierno extranjero, incluidas sus capacidades nucleares.

En esta ocasión, seis de los nueve documentos son peticiones para un perdón presidencial, que van acompañadas de material de apoyo y que entran dentro de las competencias del presidente. Otros dos documentos se refieren a "iniciativas sobre migración y poderes presidenciales bajo la ley de Migración y Nacionalidad, así como sobre control fronterizo".

El último documento es un correo electrónico impreso sobre un programa deportivo en una academia militar, recoge la cadena NBC.

Frente a la petición de Trump, el Gobierno estadounidense entiende que los nueve documentos forman parte del archivo presidencial de la Casa Blanca y, por lo tanto, no deberían haber estado en manos del ex mandatario una vez finalizado su mandato.