Las autoridades rusas de Sebastopol, en la península de Crimea, han declarado este sábado un gran incendio por el impacto de un avión no tripulado de Ucrania contra dos depósitos de combustible, de momento sin víctimas que lamentar, mientras Kiev asegura que al menos una decena de estos enormes contenedores están en llamas tras el ataque, en represalia por la muerte de 22 personas por un bombardeo ruso en la ciudad de Uman.

El gobernador de Sebastopol, Mijail Razvozhaev, ha explicado en su cuenta de Telegram que las llamas se han extendido por un área de un kilómetro cuadrado y ha pedido a los residentes que mantengan la calma. "Un tanque de combustible está en llamas cerca de la calle Hermanos Manganari, en la bahía de Kazachya", hizo saber el gobernador en su mensaje inicial.

Tras cierta confusión en los datos, Razvozhaev ha acabado confirmando el impacto de un solo dron en los depósitos. Un segundo aparato no tripulado fue derribado por militares en puestos de observación con armas ligeras. "Sus fragmentos fueron encontrados en la orilla cerca de la terminal" ha hecho saber el gobernador.

El propio Razvozhaev ha informado posteriormente de que los servicios de emergencia han logrado sofocar el incendio. "El director del departamento principal del Ministerio de Situaciones de Emergencias para Sebastopol, el general Alexei Rojlin, acaba de informar de que el fuego ha sido totalmente extinguido", ha indicado Razvozhaev en su canal de Telegram.

El ataque fue confirmado posteriormente por Ucrania a través del asesor del Ministerio del Interior, Anton Gerashchenko, en su cuenta de Twitter. "Un depósito de petróleo está en llamas en Sebastopol después de ser alcanzado por un dron en la madrugada", ha hecho saber en un mensaje que acompaña con un vídeo que exhibe una enorme columna de humo que emerge de las llamas de las instalaciones alcanzadas.

Columna de humo negro

En un balance posterior, sin embargo, el Ministerio de Defensa de Ucrania ha asegurado que al menos una decena de tanques se encuentran en llamas y que ahora mismo 40.000 toneladas de derivados del petróleo se están convirtiendo en una columna de humo negro que domina la ciudad.

Andriy Yusov, representante de la Administración Estatal de Ucrania, ha indicado que los productos derivados del petróleo destruidos estaban destinados a "la flota del Estado agresor en el Mar Negro", en referencia a los buques de guerra rusos en el puerto de la ciudad.

"Esto es un castigo de Dios, en particular por los civiles asesinados en Uman, entre los que hay cinco niños. Todos los residentes de la Crimea temporalmente ocupada tendrán que permanecer lejos de estos objetivos en un futuro cercano", ha añadido en comentarios recogidos por Ukrinform.

Unos 18 grupos de bomberos, para un total de 60 efectivos, así como los servicios de Inteligencia rusos se encuentran ya en el lugar del incendio para recabar más información al respecto, según el mensaje recogido por la agencia rusa TASS.

Dada la proximidad del incendio a las aguas del puerto, las autoridades han pedido que remolcadores de la Flota del Mar Negro sean empleados para bombear agua en las tareas de extinción, mientras los bomberos siguen buscando la manera de bloquear el acceso de oxígeno a la zona de combustión.

El gobernador ha prometido que el suministro de combustible no se verá afectado por este ataque.