La iglesia parroquial de Santiago Apóstol de Elizondo fue ayer escenario de una de las ovaciones más largas, intensas y agradecidas que se hayan escuchado en mucho tiempo, con ocasión del reconocimiento a los feligreses Paquita Eraso Olaetxea y Eusebio Izeta Elizalde, organista y director del canto del pueblo respectivamente, por su labor en pro de la comunidad. El homenaje se acompañó de un muy hermoso concierto de Julián Ayesa Gorri, organista de la Capilla de Música de la Catedral de Pamplona, que se puede considerar el estreno oficial del órgano de Elizondo tras su reciente restauración.

La familia parroquial llenó el templo para expresar sincero agradecimiento a Paquita Eraso, 96 años y 97 el próximo enero, y a Eusebio Izeta, 85 años y hombre que anima desde décadas y dirige el coro del pueblo. El párroco de la iglesia de Santiago Apóstol, Javier Azpiroz, expresó su agradecimiento y distintos feligreses les obsequiaron con unas tallas de la Anunciación de la Virgen para Paquita y de la Maternidad a Eusebio, y unos ramos de flores.

Antes, Julián Ayesa brindó un excelente concierto con el órgano que Francisco Aragonés construyó en 1918 para la parroquia cuando esta se trasladó desde su emplazamiento original en Gurutzaldeko Plaza, al actual en plaza de los Fueros. El concertista, que intercaló explicaciones didácticas, recordó precisamente a don Juan Berekoetxea, el sacerdote organista de Elizondo del que recuperó en el seminario una partitura que solía interpretar, la Marcha de Haendel que sonó grande y majestuosa y enseñó las brillantes posibilidades del intrumento parroquial.

Luego, el titular de la parroquia, Javier Azpiroz, recordó su llegada a Elizondo hace 17 años y encontró en don Miguel Alberro y don Julián Michelena, anterior párroco y coadjutor, y en Paquita Eraso, un equipo de personas volcadas con su iglesia y su pueblo, y con cariño y vehemencia dio las gracias y deseó seguir contando con los homenajeados. El cierre fue impagable con Eduardo Zubikoa interpretando un Agur, Jesusen ama precioso que fue el broche exacto de la jornada.