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La Ruta Quetzal vuelve a Baztan

la expedición del explorador miguel de la quadra salcedo repite la visita didáctica que hizo en el año 2006

La Ruta Quetzal vuelve a BaztanFoto: ondikol

la figura y la extraordinaria labor política y administrativa de Juan de Goyeneche, un baztandarra de Arizkun y de las personalidades más relevantes de la que Julio Caro Baroja llamó La hora navarra del XVIII, traerá a la Ruta Quetzal y a sus participantes al Valle de Baztan por segunda vez. Los pueblos de Arizkun y de Irurita, los dos cuna de los miembros más destacados de la saga de los Goyeneche, serán referentes este año de la iniciativa que creó y dirige Miguel de la Quadra Salcedo, gran conocedor y amigo del valle.

La tierra de Baztan ha dado algunos de los personajes más notables de la conquista y la colonización de América del Sur y América Central, y aunque Juan de Goyeneche no figura en esa nómina, varios de los descendientes de su familia sí lo hicieron y alcanzaron gloria, prestigio y fortuna en la política, la iglesia y la economía de las sociedades americanas entre las que dejaron una huella singular. En la anterior visita de la Ruta Quetzal, en 2006, fue otra familia de Baztan, los Aycinena, oriundos de Ziga, algunos de los cuales llegaron a ocupar la presidencia de Guatemala, alcanzaron el obispado y atesoraron una de las mayores fortunas del país.

POLÍTICO Y PERIODISTA

Fundador de Nuevo Baztan

Juan de Goyeneche y Gastón nació el año 1656 en la Casa Goyenechea, en el barrio de Ordoki, de Arizkun. Era el menor de seis hermanos, por lo que la ley o costumbre de preservar la hacienda en manos del hijo designado por el padre le hizo marchar a los 14 años a Madrid para estudiar en la Corte. Lo hizo en el Colegio Imperial de los Jesuitas y allí estableció un fuerte vínculo con la Compañía de Jesús, en tanto que, con sus ahorros, creó una biblioteca histórica, que puso a disposición de Carlos II.

Este hecho le abriría las puertas de la administración de los gastos privados de Carlos II, con acierto y excelentes resultados, ganándose la plena confianza real. A los 33 años se casó con María Francisca de Balanza, hija del también navarro Martín de Balanza, y tuvieron varios hijos, si bien solo sobrevivieron Francisco Javier, Francisco Miguel y Juana María.

Al parecer, fue hombre muy religioso con una gran devoción por su paisano San Francisco Javier, cuya familia por parte materna, María de Azpilikueta, tenía solar muy cercano al suyo, lo que quizás explica su vinculación con los jesuitas y su religiosidad, su decidida participación en la creación de la Real Congregación de San Fermín de los Navarros. En este terreno, fue Procurador de la Colegiata de Roncesvalles en Madrid durante una década y perteneció a la Congregación de San Ginés.

Las cotas de poder alcanzadas por Goyeneche le hicieron fundamental en la gestión real, llegó a tesorero general de las Milicias y de la reina Mariana de Neoburgo, esposa de Carlos II, y muerto éste apoyó decisivamente a Felipe V en la Guerra de Sucesión y en los empréstitos al Rey, lo que le proporcionó grandes privilegios y negocios, y fue Tesorero de las reinas María Luisa e Isabel de Farnesio, y queda constancia en el frontal de su casa de Arizkun, muy mejorada y convertida en palacio.

A Goyeneche le denominaban El Viejo en Madrid para distinguirlo de otros familiares del mismo apellido, era hombre ilustrado amigo de la lectura (ya se dice de la gran biblioteca que formó) y de la comunicación. Así, en 1697 funda la Gaceta de Madrid, el primer periódico español de origen privado y luego público convertido en el Boletín Oficial del Estado actual, ahora sin edición en papel. Los talleres estaban en la calle Alcalá, que sería después el Círculo de Bellas Artes.

Su obra cumbre es considerada la fundación del municipio de Nuevo Baztan, a 50 kilómetros de Madrid, y del que encargó diseño de los edificios y distribución urbanística al reconocido arquitecto José Benito Churriguera. A comienzos del siglo XX se intentó restaurar el poblado antiguo y en 1941 se declaró Monumento Histórico-Artístico. Desde el 16 de marzo del 2000 el conjunto formado por el palacio de Goyeneche y la iglesia (dedicada a San Francisco Javier) están considerados Bienes de Interés Cultural.

Allí moriría Juan de Goyeneche en 1735 y fue enterrado en la Iglesia de San Francisco Javier del municipio que había creado. Gracias a él y a otros como él, que, en este caso con extraordinaria fortuna, marcharon a América, traerán a Baztan a los jóvenes de la Ruta Quetzal. Y como siempre, bienvenidos.