En 1861 - Los noticiarios se volvían con preocupación hacia los Estados Unidos, donde la tensión crecía por momentos. El 4 de marzo, Abraham Lincoln había accedido al cargo de presidente, y al mes siguiente, el 12 de abril, comenzaba la sangrienta Guerra de Secesión entre yankees nordistas y confederados sureños.

Los acontecimientos descritos nos dan la medida de la antigüedad de la foto que hoy reproducimos. Vemos, arriba y a la derecha, el farallón rocoso sobre el que se asentaba la Capitanía Militar, y hacia el centro la Rochapea y las faldas del monte Ezkaba-San Cristóbal. A la izquierda se adivina el trazado de la calle Errotazar, siguiendo el curso del río, y prácticamente en el centro de la imagen puede verse el puente de San Pedro. Casi en primer plano, por último, distinguimos a tres soldados de los que guardaban el cercano portal de la Rochapea. Miran al fotógrafo y posan tranquilos y relajados, como si supiesen que faltaban aún once años para que empezara la Segunda Guerra Carlista...

Hoy en día - La zona se encuentra tan solo razonablemente transformada, si tenemos en cuenta el siglo y medio transcurrido. Tras muchas cábalas y pruebas, hemos deducido que la foto antigua se obtuvo desde una de las terrazas del antiguo Hospital de la Misericordia, actual Museo de Navarra, a cuyo personal debemos agradecer las facilidades dadas para la repetición de la imagen.

Podemos apreciar que la agreste roca de la parte superior derecha fue forrada de sillería en algún momento de estos 152 años, y comprobamos también que el arbolado oculta hoy el puente de San Pedro y el propio curso del río. Sí que puede adivinarse el nuevo puente del Vergel, así como parte de las instalaciones de las piscinas de Aranzadi. Por otro lado, si fuera posible desplazar las dos fotos hacia abajo, veríamos aparecer enseguida en ambas la calzada de la calle Santo Domingo. En la foto vieja aparecería también por la izquierda el portal de la Rochapea, pero no en la foto nueva, puesto que fue derribado en 1914.