huarte - El Ayuntamiento de Huarte contactó ayer con la propietaria de la vieja fábrica harinera Huici Leidan, Solvia Inmobiliaria (vinculada al Banco Sabadell), a la que pedirá formalmente que dote de mayor seguridad a las instalaciones y que cierre el conjunto del recinto abandonado para evitar el acceso de jóvenes al lugar, tal y como venía sucediendo antes del incendio declarado el pasado miércoles por la noche. Está previsto que la empresa inmobiliaria evalúe hoy mismo los daños in situ y que afectan principalmente a la nave central de las tres plantas en pie, cerradas en 2013. En principio, los bomberos que participaron en las tareas de extinción no creen que colapse el edificio, situado a escasos metros de las primeras viviendas de Olaz, pero será el Consistorio el que determine en una comisión prevista para la semana que viene las medidas que se van a exigir a Solvia, sin descartar su derrumbe para evitar posibles riesgos. “Hubo un requerimiento para tapiar los edificios pero en la nave que se incendió se podía entrar; no sabemos si se rompieron los cierres”, destacó el alcalde Alfredo Arruiz. A la zona se accede por la trasera, fundamentalmente a través del parque Areatzea, en el entorno al parque fluvial. El planeamiento local prevé transformar el suelo industrial en un lugar de esparcimiento. Hubo otros dos incendios en esta misma nave y la presencia de restos de aceites y materiales de madera ayudó a propagar el fuego. El Consistorio prevé también la retirada en breve de los depósitos acumulados por Viguetas.
Un retén del Parque Central de bomberos vigiló hasta el mediodía de ayer la evolución del incendio en la nave central que alojó el proceso industrial, suceso en el que no se registraron daños personales. La alerta llegó a las 22.30 horas cuando las llamas alcanzaban el tejado. Fueron movilizados los bomberos del parque Central (Cordovilla), que observaron el riesgo de que se hundiera la cubierta, con estructura de madera y chapa, por lo que atacaron el fuego desde el exterior. La basura y escombros acumulados en el interior de las instalaciones hicieron que el incendio tuviera una gran carga de fuego, siendo imposible su “extinción directa”. Al parecer las paredes de hormigón consiguieron mitigar poco a poco el fuego dos horas después de su inicio (una columna de humo era visible hasta la tarde de ayer). Los bomberos, tras comprobar que no existía riesgo de que se extendiese el fuego más allá de la vieja fábrica, se retiraron dejando en el lugar un retén que fue relevado por otro equipo ayer por la mañana. Acudió al lugar Policía Foral y Policía Municipal de Egüés, y con carácter preventivo, una ambulancia pero nadie precisó asistencia sanitaria. La carretera de acceso a Olaz por Las Fuentes permaneció cerrada hasta las cinco de la madrugada.