cintruénigo - El santuario de La Purísima de Cintruénigo volvió a acoger el pasado domingo una de las más importantes fiestas religiosas de la localidad, la fiesta de La Purísima. Desde el punto de la mañana los auroros cirboneros recorrieron las calles entonando la aurora a la Virgen. Sobre las 8.30 auroros y cofrades se trasladaron rezando hasta el santuario que se encuentra a un kilómetro de la población. Allí, en la explanada, se había encendido de madrugada la tradicional hoguera. Una vez llegada la comitiva, se celebró la misa de Hermanos presidida por el párroco Santiago Jiménez quien en su homilía destacó “la devoción que la población cirbonera ha tenido a este santuario donde se venera a la Inmaculada”. La misa estuvo acompañada por el grupo de auroros.

Finalizado el acto religioso el presidente de la junta de la Hermandad Gregorio Francés informó de las actividades que se llevan a cabo así como el número de socios que asciende ya a 800 con cuatro generaciones en algunas de las familias.

El presidente agradeció a todas aquellas personas “que a lo largo de todo el año colaboran de distintas maneras en la conservación y limpieza del santuario” y mencionó a la Bodega Cooperativa Cirbonera que todos los años dona vino que los feligreses toman en la explanada, acompañado de pastas de las panaderías que también colaboran.

A las 11.00, y con la asistencia de la corporación acompañada de la banda municipal, tuvo lugar la misa mayor corriendo la parte musical a cargo del coro parroquial.

La víspera se quemó el Los Paseos la tradicional hoguera y la banda ofreció a los asistentes un variado concierto. - E.S.