La comarca del Prepirineo/ Pirinioaurrea es un territorio sin nombre propio. Con un pronombre se define geográficamente a una comarca de difícil vertebración compuesta de zonas periurbanas, agrourbanas, rurales y metropolitanas.

La forman doce municipios, con una población según datos facilitados por el Gobierno de Navarra, de 5.718 habitantes en 2019, con Aoiz a la cabeza (2.695) y Urraúl Alto, como municipio con menor número de habitantes (133 personas empadronadas de las que solo habitan en todo el valle 60).

Hay que tener en cuenta que Aoiz, con Lumbier y Romanzado (estos dos municipios pertenecientes a la comarca de Sangüesa), forman las cuencas Prepirenaicas, un espacio de transición entre el alto Pirineo Navarro y la Zona Media, una cubeta entre montañas en las que se ubican 14 ayuntamientos con un registro de 7.188 habitantes (2019), 53 más que el año anterior (+0,74%). Sin embargo, es un crecimiento inferior al resto de Navarra, (1,02%).

El informe anual de la Agencia de Desarrollo de 2020 sobre dichas cuencas arroja sobrecogedores datos de su evolución y situación demográfica. Presentan en su conjunto una densidad de 8,26 hab/km2 (Europa califica por debajo de 8 zona en extrema gravedad de despoblamiento y el umbral de riesgo en 12,2 hab/km2. Sin Aoiz ni Lumbier, la zona de estas cuencas se queda por debajo del 4%.

Si nos ceñimos a la comarca del Prepirineo, el mapa de la evolución de su población en los últimos 20 años pinta de rojo a Oroz Betelu, que ha pasado de 210 habitantes a 147 (-18%). La otra pérdida significativa la registra Urraúl Alto, con 30 habitantes menos en el mismo periodo (de 167 a 137). Este valle también consta como un municipio sin nacimientos en 2019, junto con Izagandoa. El resto de la comarca, es un cuenta gotas de 1, 2 ó 3 nuevos nacimientos. La tendencia la natalidad la rompe Aoiz, con 26, pueblo de acogida migratoria.

el caso de urraúl alto "Esta es la Navarra de las aldeas", apunta Carlos García Pascual, agente de desarrollo de Cederna en la zona Aoiz-Lumbier. Y lo argumenta: "Lo es por densidad, un centenar de pequeñas aldeas casi un 10% de Navarra con menos de un 1% de habitantes), una zona en extrema situación de despoblamiento inferior a 8hab./km2; por diseminación (aproximadamente una entidad por cada 10 km2. Quitando Aoiz y Lumbier no llega a 30 habitantes por aldea); por su envejecimiento y regresión". El problema de Urraúl Alto es el más grave de la comarca. "Es un problema de vertebración y conexión interzonal de Navarra que aboca a su desaparición", sentencia.

El informe elaborado por el Observatorio de la Realidad Social de Navarra presentado por la Dirección General de Despoblación del Gobierno foral, la situación en este valle resulta más regresiva que el resto, comparándola incluso con la comarca del Pirineo, la más deprimida demográficamente en la Comunidad foral.

Según fuentes del Instituto de Estadística de Navarra, el primer parámetro que analiza la desigualdad es la densidad de población que a fecha de 2019 es en Navarra de 63hab/km2, en la comarca del Pirineo de 4,1, mientras que en Urraúl Alto es de 0,9 hab/km2.

Con un índice de poblamiento elevado de 18 entidades 12 habitadas y 6 despobladas, el dato de su evolución demográfica es también desalentador: en los últimos 20 años ha perdido el 22% de su población (el Pirineo el 17% y Navarra ha crecido un 20%). Este parámetro, que no augura la renovación generacional, se agudiza con la tasa de natalidad mencioanda de 0 (5,7 en el Pirineo y 8,3 en Navarra). En los últimos 10 años tan solo ha habido 3 nacimientos en el valle, mientras que las defunciones han sido 14 en el mismo periodo. Datos relevantes de su envejecimiento es el hecho de que su población mayor de 65 años equivale al 30% (24% Pirineo y 20% Navarra) y la edad media es de 53 años (Pirineo, 46, Navarra 43). "Son indicadores preocupantes de un valle que sitúan a la comarca como una zona marginal frente a la macrocefalia del centro y sur de Navarra", reitera.

Martín Iriarte Vizcay, alcalde de Urraúl Alto, reconoce que es "poco optimista" con la situación y el futuro. Él vive en Ururozqui, el municipio más habitado del valle. A diario no llegan a 25. En el vecino Imirizaldu tres casas abren sus puertas y en muchos pueblos solo vive una familia. "Hay que estar muy arraigado para seguir viviendo aquí. Agricultores y ganaderos lo tienen más difícil que en otros núcleos mayores, vivir en el medio rural es más caro, dependes del coche y aquí no hay trabajo", asevera.

Sin embargo, Aoiz cabecera de la comarca, tiene población activa y una tasa de desempleo por encima de Navarra. Pierde centralidad y deja de prestar servicios a la comarca.

"Es tan grave una alta tasa de paro en Aoiz, fuerza tractora y centro funcional de la economía de la comarca, como una baja tasa de paro en el resto del territorio, porque refleja, más que la existencia de oportunidades de empleo de calidad, una baja tasa de población activa en edad de trabajar", explica Carlos García.

En esta realidad hay, a pesar de todo, un nivel satisfactorio de emprendimiento, ayuntamientos y grupos que luchan contra la adversidad en un territorio solidario con recursos locales suficientes para plantear un desarrollo local de futuro. Pero es una reivindicación coral que la sangría demográfica hace necesario el apoyo institucional.