El centro de Anfas de Estella-Lizarra cuenta con actividades lúdicas desde que en 1976 un grupo de familias y voluntarios crearan el Club de Ocio Lizarrakoa. 45 años de actividades en el centro pero sobre todo buscando la calle. Un filosofía que ha intentado durante todo ese tiempo que la personas con discapacidad intelectual o del desarrollo que han participado, mejoraran su calidad de vida. Es el caso de Itsaso Martínez, una adolescente de 19 años que desde muy pequeña acude cada sábado al centro de Anfas en Estella. "Cuando nieva van a la nieve, si son carnavales pues se disfrazan y salen a buscar los pasacalles" comentó la madre de Itsaso, Larraitz Trinkado.

La responsable de del ocio del centro es la técnica Elena Arive quien destacaba la importancia de estas actividades "el ocio es fundamental para todas las personas y desde luego también para las discapacitadas intelectual y de desarrollo porque en muchas ocasiones no cuentan con espacios o lo que les falta es un grupo de amigos y amigas que les anime a realizar actividades. El objetivo como el de todo el mundo es que se lo pasen bien". Arive tiene muy claro que a través de las actividades que realizan la sociedad visibiliza la discapacidad y esto hace que se conozca también la labor de Anfas. "Es importante que el entorno nos conozca y que se visualicen las necesidades de las familias que acuden al centro". Aseguran que para que estas actividades sean posibles, cuentan con un equipo de profesionales y un numeroso grupo de personas voluntarias, el caso de Estella ocho personas que se alternan en la realización de las diferentes actividades.

Para Estíbaliz Hortaleza, responsable de Anfas en Tierra Estella, generar estas actividades de ocio "incide directamente en la calidad de vida; les ayuda a sentirse bien consigo mismos y esto es calidad activa: se socializan con otras personas, es decir, favorece algo tan importante para todos como es que puedan tener una cuadrilla. Un espacio donde decidir qué hacer y cómo hacerlo. Romper con esas barreras que impone la sociedad y facilitar su inclusión en la vida normal".

En Tierra Estella actualmente existen tres grupos de ocio. Dos en la Ciudad del Ega. Uno de ellos formado por un grupo de seis chicos y chicas jóvenes que ocupan las mañanas del sábado y otro de adultos que se reúnen los sábados a la tarde y que cuenta actualmente con 10 participantes (antes de la pandemia eran 14). En Lodosa también ha surgido más recientemente un grupo "lo están viviendo como un gran oportunidad", comentó Estíbaliz. Con todo aseguran desde el centro que animaron a que todas las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo que estén interesadas, "que se pongan en contacto con nosotras y estudiaremos sus necesidades particulares y también en el grupo en el que encajaría".

Respecto a la petición de voluntarios afirman que se pasen por Anfas y que vean el trabajo que se realiza "aquí les ofrecemos formación y también muchas cosas prácticas".

"El objetivo, como el de todo el mundo, es que se lo pasen bien"

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