- Tras la tensa tarde del jueves y la preocupación de la madrugada, durante el día de ayer la lluvia no arreció en Baztan, a excepción de un momento por la mañana, un respiro que sirvió para que el caudal del río Baztan se redujera considerablemente y el nivel de alerta bajara, volviendo, en cierto modo, a una calma tensa que no se disipó en toda la jornada, porque seguía lloviendo, aunque con menor intensidad que en la jornada anterior. De todas maneras, los niveles de los cuatro datos de referencia que toma en cuenta Lamia, la aplicación para gestionar emergencias y alertas por inundaciones del río que gestiona el Ayuntamiento de Baztan, las estaciones de aforo de Erratzu y Oharriz en el río Baztan junto a los registros pluviométricos de Iñarbegi y Gorramendi se mantuvieron fuera de peligro, por lo que, aunque el río iba crecido, no se temió su desbordamiento, a pesar de que nadie se fiaba completamente.