El concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu, respondió ayer en la comisión de Presidencia, a preguntas del PSN, que "estamos en negociaciones" con los bares de la cuesta del Labrit, pero lo cierto es, según confirmaron los propietarios de los establecimientos a este periódico, que a día de hoy no se les ha concretando nada y no han mantenido más encuentros con el área municipal.

La semana pasada "nos reunimos los bares de la calle entre nosotros", indicó un hostelero, y "la mayoría" seguía apostando por las carpascarpas.

Sin embargo, sabido ya que el Ayuntamiento no les va a permitir este año "ni música ni carpas", añaden que "no hay más que negociar" y ya hay locales que están solicitando terrazas como alternativa para su clientela.

Hay que señalar que los bares del Labrit no han podido instalar durante la pandemia terrazas, porque el Ayuntamiento no las autorizó, según aseguran. "Somos los únicos negocios de hostelería que no hemos tenido permiso. Alegaban que éstas quitaban aparcamientos, cuando, varias calles más allá, sí se permitían colocar", se lamentan.

Respecto a la postura de Navarra Suma de suspender las carpas que llevaban 32 años funcionando, alegando ahora que "tenemos que ser como el resto de bares, según nos dicen", añaden que "esto se podía haber abordado de otra manera. No era el momento ni el año. Ni eran las formas, después de dos años con pérdidas mes a mes", y además añaden que "ni va a solucionar el botellón del Labrit, ni la venta ambulante, ni el vandalismo, como se proponen".

Esta postura la comparte el PSN, que en una nota asegura que la prohibición de este espacio es "carente de toda lógica" y afectará a "un espacio referente muy demandado por la ciudadanía en las fiestas", opina el grupo. Unido a esto, el grupo ha criticado que "una vez más se toma una decisión de este calado sin dar información a los grupos ni explicarlo públicamente".