1,2 kilogramos de peso, 30 centímetros de altura y txapela de 28 centímetros de diámetro. Un hongo superdotado anda suelto en la cocina del bar Gazólaz de Obanos.
“A ver, que me diga alguien a mí... por favor, ¿qué es eso?”, se le escucha a Costi Nechita en el vídeo en el que da cuenta del hallazgo, durante una jornada de monte en el parque micológico Erro-Roncesvalles. “Mirar un poco, hostias, qué enorme, ¿eh?”, se le escapa después a Nechita, de profesión jardinero, pluriempleado como cocinero en Obanos y aficionado a la micología.
"Mirar un poco... hostias, es enorme, ¿eh?"
“Es un tamaño extraordinario, yo no he visto ninguno así, ni de los que coge mi marido ni cuando vamos a comprar”, explica su mujer, Catalina Nechita. Esta pareja rumana llegó a Navarra hace 23 años. Desde 2015 regentan el bar Gazólaz de Obanos, negocio familiar en el que este fin de semana ofrecerán esta monstruosidad. Calculan que el súper hongo alcanza para diez raciones. Bien a la plancha, “sin aceite, solo con sal Maldon”, o en revuelto. Un gran manjar.
