Una resolución firme del Tribunal Supremo este pasado otoño abrió las puertas a la empresa Nedgia a ejecutar el gasoducto proyectado en Etxeberri y Lekunberri, una vez agotada la vía judicial emprendida por los ayuntamientos de Arakil y Larraun contra el trazado; unos 14 kilómetros, 5 de los cuales atravesarían la Zona Especial de Conservación de Aralar. “Es el momento de sumar fuerzas y poner freno a este proyecto impositivo. Para que nuestra reivindicación se escuche en voz alta y clara, os convocamos a la manifestación que tendrá lugar el 25 de marzo, a las 18.00 horas desde la plaza de Lekunberri”, señalaron desde la plataforma Aralar Zaindu Dezagun.
Al respecto, recordaron que dicha plataforma se creó en 2020 cuando la empresa inició la comunicación de los expedientes de expropiación a los propietarios de los terrenos que atraviesa el trazado del gasoducto, incluido los concejos. “En ese momento empezamos a recopilar información sobre el proyecto y la ponemos en común, dándonos cuenta de que era un proyecto totalmente destructivo. Pedimos al Gobierno de Navarra y a Nasuvinsa los diferentes informes sobre alternativas al trazado elegido. Se puso de manifiesto que no hay ningún estudio y ninguna intención de trabajar sobre otras alternativas posibles”, destacaron.
Así, la plataforma, a lo largo de estos dos últimos años, se ha centrado en informar sobre el proyecto a través de diferentes iniciativas como itinerarios, mesas redondas, difusión de vídeos y mensajes informativos. Según señalaron, “el gasoducto tendría una anchura de 8 metros y obligaría a talar más de 5.000 árboles”. No obstante, indicaron que “no se ha informado del trazado exacto y que no existen estudios topográficos ni geológicos para valorar su impacto”, Por ello, piden que “se abra un proceso de información y participación pública más activo y transparente para minimizar sus impactos ambientales, sociales y económicos y así poder valorar otras alternativas y solucionar este problema que afecta a Aralar y su entorno”.
Trazado alternativo por la Vía Verde del Plazaola
La plataforma puso en valor el trabajo realizado por los ayuntamientos de Larraun y Arakil, que recurrieron en agosto de 2020 la resolución de la dirección del Servicio de Ordenación Industrial, Infraestructuras Energéticas y Minas de Gobierno de Navarra por la que se aprobaba la ejecución del proyecto y su reconocimiento de utilidad pública. Además de exponer los efectos medioambientales que tendría este proyecto, principalmente en el ZEC de Aralar, se planteaba otro trazado alternativo por la Vía Verde del Plazaola para aprovechar el espacio del conducto que quedó inutilizado con la obra de canalización del agua de Iribas a Irurtzun. Precisamente, era una de las alternativas que barajó Nedgia en un principio.
Por otro lado, representantes municipales de la ZEC de Aralar reclamaron hace unas semanas al Ejecutivo que “actúe con responsabilidad”, y que se tenga en cuenta la alternativa de la Vía Verde.
