La asociación Sanfermines 78: gogoan! denuncia el “ensalzamiento” de la Policía Nacional que se llevará a cabo el próximo día 2 de febrero, segundo día de la escalera sanferminera, en la Iglesia de San Lorenzo.
Tras celebrarse el pasado 1 de enero en la Iglesia de San Lorenzo (Capilla de San Fermín), de Pamplona, la primera misa de la escalera sanferminera, el párroco, Javier Leoz, anunció que en el segundo peldaño se "ensalzarán los 200 años de la fundación de la Policía Nacional" por el “papel fundamental en la seguridad de los Sanfermines” que ha tenido este cuerpo.
Frente a este anuncio, Sanfermines 78: gogoan! ha denunciado en un comunicado "el lavado de cara que el citado ensalzamiento eclesial de la Policía supone en relación a la actuación de un cuerpo que, con mucha diferencia, es el que más violentamente ha agredido a la población de Pamplona durante sus fiestas sanfermineras".
Ante la controversia suscitada el párroco Javier Leoz aseguró que fue el propio cuerpo de la Policía Nacional el que pidió a la parroquia poder entregar un capote de San Fermín coincidiendo con la segunda misa de la Escalera, iniciativa a la que se dio una respuesta positiva al igual que se han atendido otras peticiones de diferentes colectivos e instituciones.
Desde el colectivo por contra recuerdan "los sucesos ocurridos en los Sanfermines de 1978. En ellos, tras una brutal e injustificada carga policial en la plaza de toros al terminar la corrida, la Policía disparó de forma indiscriminada contra los miles de personas que se encontraban en su interior, utilizando para ello de forma gratuita sus porras, balas de goma, botes de humo, gases lacrimógenos y disparos de fuego real".
"Luego, la agresión policial se extendió por las calles cercanas y un joven, Germán Rodríguez, resultó muerto por disparos de la Policía. Hubo además once personas más heridas de bala y cerca de 300 tuvieron que ser atendidas en los centros hospitalarios por contusiones, fracturas, heridas graves, intoxicación por humos y gases, etc... La propia Policía, en un informe oficial, reconoció que esa noche disparó 4.153 pelotas de goma, 657 botes de humo, 1.138 botes lacrimógenos y 134 balas de munición real".
“No podemos menos que denunciar este homenaje por cuanto contribuye a fomentar la política de silencio e impunidad para con aquel crimen de Estado ejecutado por la Policía y amparado por el Ministerio del Interior dirigido entonces por Martín Villa”, añade la asociación.
