Apenas 20 días después de aprobarse la moratoria de las plantas de biogás, el departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra ha dado un visto bueno inicial a la planta de biogás que la firma Ribercogas prevé instalar en Cortes. Publicado en el BON esta semana, Medio Ambiente indica que “el Proyecto de Planta de digestión anaeróbica y generación de biometano con biogás, promovido por Ribercorgas, en Cortes, previsiblemente no tiene efectos significativos sobre el medio ambiente, en los términos establecidos en este informe de impacto ambiental”.
Esta autorización y aprobación inicial es el paso previo a la Autorización Ambiental Integrada que vendría más adelante pero que para aprobarla la firma ha de realizar algunos cambios que sugiere el departamento, pero al haberlo obtenido indica que podría obtenerlo. La planta se encuentra a 2,5 kilómetros de Cortes y 3,5 kilómetros de Buñuel, localidades que, de momento, no han presentado reclamaciones a este proyecto.
El proyecto
Se trata de una planta de valorización de residuos orgánicos ubicada al norte del municipio de Cortes junto a la muga con Buñuel. Se valorizarán 68.400 toneladas al año de residuos orgánicos (purines, estiércol y gallinaza generados en explotaciones ganaderas cercanas a la ubicación de la planta, pero también, una cantidad considerable de subproductos –como aguas glicerinosas– y residuos de la industria agroalimentaria). Tras esa digestión se produce biogás que se limpiará y mejorará para producir biometano (unas 5000 toneladas al año, 28,09 GWh/a) que se inyectará en la red y, además, se generan unas 63.500 toneladas cada año de digestatos sólidos y líquidos que en conjunto se destinan a su reparto agrícola como fertilizante, siguiendo un plan territorial, salvo una parte de los sólidos que se utilizarán para obtener 6.800 toneladas de compost.
Recoge la fertilización anual de 1790 parcelas (secano y regadío) repartidas en Bardenas Reales y en 43 términos municipales entidades (35 de Navarra, 6 de Zaragoza, 2 de La Rioja y uno de Huesca)
Contando con 260 días de trabajo al año, la firma estima que entrarán con residuos 5,19 camiones (20 t) al día y otros 5 de salida, si bien en las alegaciones la Fundación Sustrai señaló que “Superarían los 50 vehículos de transporte pesado en un sentido, y por tanto más de 100 en ambos sentidos, ida y vuelta diariamente, que para un horario de recepción de residuos de 10 horas supone un vehículo pesado cada 6 minutos”, señalan además de afirmar que el volumen esperado de digestato generado es de 63.500 Tm/año, “por lo que se estima en 111 días el almacenamiento teórico, lo que es inferior a los 120 días mínimo establecido en la orden Foral”. La firma asegura que la normativa habla de 90 días.
La versión preliminar del plan territorial de reparto de digestatos sólidos y líquidos producidos, recoge la fertilización anual de 1790 parcelas (secano y regadío) repartidas en Bardenas Reales y en 43 términos municipales entidades (35 de Navarra, 6 de Zaragoza, 2 de La Rioja y uno de Huesca). Para su confección se ha partido de la base de los planes de gestión de estiércoles de las actividades ganaderas que aportarán los residuos a la planta, algunas de las cuales, forman parte de los promotores de la planta.
En el proyecto no se incluye propuesta de dotación de agua potable. El agua necesaria para el funcionamiento de la planta se obtendrá de los propios procesos y de la recirculación de aguas con lixiviados. Las aguas de limpieza y pluviales contaminadas con lixiviados se recogerán en la balsa de recepción para incorporación al proceso.
La firma estima que entrarán con residuos 5,19 camiones al día y otros 5 de salida, si bien en las alegaciones de Sustrai señaló que “superarían los 50 vehículos pesados en un sentido, y por tanto más de 100 en ambos sentidos, ida y vuelta diariamente"
Cambios en el proyecto
Desde Medio Ambiente han señalado algunos problemas que generaría la planta, pero propone realizar algunos cambios como “para no favorecer las colisiones de aves con las palas de los aerogeneradores cercanos, no se deberán usar especies que alcancen porte arbóreo, que puedan servir como refugio para aves silvestres”. En este sentido añaden que si se constatara que la actividad de la Planta de biometano y biofertilizantes contribuye a aumentar “hasta límites no aceptables, la mortalidad por colisión de avifauna y quirópteros en los parques eólicos cercanos, Medio Ambiente podrá imponer cuantas medidas sean oportunas para evitar este impacto, incluso la parada de la actividad en la planta”.
Además, afirman que no se podrán aplicar purines ni derivados en los cultivos cerealistas de secano desde el 1 de marzo hasta el 31 de agosto, “de manera que se garantice la protección de las aves esteparias en su época reproductora”, al igual que “en barbechos no se aplicarán purines ni derivados” y se pide a Ribercogas que se evite “la contaminación de cursos de agua y humedales, tanto si son estacionales o continuos”. Por último, prohíben la utilización de purines, digestato y/o estiércol líquido a una distancia mínima de 50 metros desde las masas de agua permanentes, teniendo en cuenta tanto los cauces principales como la red secundaria.