Seis meses después de rechazar la misma propuesta, los complementos salariales de la Policía Municipal volvían al pleno del Valle de Egüés. Esta vez Navarra Suma no se quedó sola y los complementos de la discordia –los que autoriza la Ley de Policías y recomiendan los informes municipales, pero sin lo pactado previamente por agentes y Equipo de Gobierno– salieron.

Para ser posibilistas, “desbloquear la situación y poder recurrir, porque esto solo lo puede resolver un Tribunal”, dijo Helena Arruabarrena (Geroa Bai) para justificar la abstención de su grupo, en vista de que no había manera de votar la negociación colectiva. EH Bildu e I-E votaron igual. Navarra Suma y el edil no adscrito a favor, y el PSN en contra. Arruabarrena reconoció que el acuerdo provocará que “cuatro agentes se trasladen y probablemente un quinto que se lo está pensando se vaya también. Esa va a ser la maravillosa seguridad que va a tener este valle después de aprobar esto”.

La alcaldesa Amaya Larraya (Navarra Suma) reconoció que “negociamos unas condiciones con la plantilla porque no sabíamos legalmente hasta qué punto podíamos llegar, y luego vimos que no se podía”, dijo sobre los informes que desaconsejaban los complementos pactados. “Los errores se reconocen”, admitió.

SEGURIDAD EN EL VALLE

Directamente relacionado con la presencia policial, el PSN trasladó una moción denunciando que “la seguridad está bajo mínimos y es manifiestamente mejorable”, con la infraestructura tecnológica en seguridad “fuera de juego, obsoleta, averiada o esperando a poner los medios para que puedan funcionar”. “Podemos intuir que no pocos agentes van a marcharse a otros ayuntamientos, donde las condiciones laborales son mejores y su trabajo está mejor reconocido”, dijo Mikel Bezunartea. Detalló que a lo largo de la legislatura “hemos pasado de una policía municipal que era la envidia de otros municipios, con agentes de muchos ayuntamientos queriendo incorporarse a nuestro municipio, a ser, posiblemente, la policía que peor servicio presta de la comarca de Pamplona y de la que todos se quieren ir. Se han dado circunstancias como turnos de trabajo sin personal ni para atender el teléfono. Si llamaba la ciudadanía para una urgencia no tenía quién le atendiera, ni siquiera se desviaban las llamadas al 112”. Por eso pidió más recursos y un estudio de necesidades.

Una moción alarmista según José Miguel Bernal (no adscrito). Una invitación al maleante según I-E o Geroa Bai. Y una realidad que, en cualquier caso, todos reconocían muy mejorable. Hasta Navarra Suma, que votó a favor de la moción. “Tenemos que ver qué recursos económicos tenemos para compaginarlos con los recursos humanos necesarios”, argumentó Juan José González.