pamplona - El Ayuntamiento de Barañáin ha solicitado al de Pamplona que los vecinos del municipio que dispongan de la tarjeta ZERT de aparcamiento puedan estacionar sus coches en Echavacoiz Norte, como medida para menguar las afecciones que sufren tras el inicio el pasado 24 de septiembre de los trabajos en la ARS5, que responden a la construcción de viviendas en Echavacoiz Norte. Las obras han inhabilitado 115 plazas de aparcamiento en la avenida de Pamplona de Barañáin, y desde el Ayuntamiento estudian además habilitar 24 plazas en la avenida Eulza, junto al Mercadona.

Así lo avanzó ayer el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Barañáin, Alberto López Iborra, en una reunión convocada para los vecinos después de que en el último pleno -el pasado jueves- fuera reprobado por la oposición, que presentó una moción en la que también se demanda la “paralización de los trabajos hasta que se aclare la cuestión de los lindes”.

Se trata de la primera fase de las obras de urbanización (la UTE Erri-Berri/Laquita) de un plan que contempla 212 viviendas, de las que 57 se construirán en primer lugar (de ACR, para las que ya ha solicitado la licencia al Ayuntamiento de Pamplona). Éstas se ejecutarán cuando comience la segunda fase de urbanización (marzo-abril).

El Ayuntamiento de Barañáin convocó la cita, a la que acudieron unas 70 personas, con el objetivo de aclarar las dudas y atender las propuestas vecinales en lo referente al proyecto y a los lindes, ya que además las obras han destapado que la problemática sobre los límites entre Barañáin y Pamplona sigue sin resolverse. Acompañado por el arquitecto asesor del Ayuntamiento de Barañáin, Txema Pardo, y el responsable de la policía municipal, Dani Cano, expuso con datos y planos los últimos avances en ambas materias y respondió a las preguntas de unos vecinos preocupados por sus plazas de aparcamiento y por mantener intactas las fronteras que, desde sus inicios, pertenecen a Barañáin.

“Problema serio” Existen en Barañáin 13.000 vehículos censados, 9.000 de los cuales son turismos, y hay 5.400 plazas para aparcar. “No todas las casas tienen garaje y muchas familias tienen más de un coche. El problema de aparcamiento en Barañáin es serio y por eso establecimos la zona ZER. Respecto a las obras no había otras posibilidades pero estamos estudiando alternativas”, indicó Cano.

López Iborra indicó que una vez finalizadas las obras en la avenida Pamplona (algo que se prevé para dentro de “dos o tres meses) las plazas volverían a recuperarse en las mismas condiciones (zona ZER y para los vecinos de Barañáin) y que esperan una respuesta por parte del Ayuntamiento de Pamplona “esta semana”. Aunque los presentes demandaron medidas inmediatas -incluso estacionar en la mediana-, desde el Consistorio recomendaron acceder al municipio por la avenida Central para evitar atascos que están generando ya embotellamientos en la rotonda de la plaza Norte.

Marco de acuerdo En cuanto a los límites entre Pamplona y Barañáin, los vecinos solicitaron que se lleve a cabo un estudio definitivo y una definición de los mismos para evitar problemas futuros, algo que desde el Ayuntamiento de Barañáin ya matizaron que se está tratando de llevar a cabo, siempre en base al desarrollo urbanístico de las zonas afectadas.

“No hay que entrar en términos de invasión, tiene que ser un cauce lógico y una definición igualitaria”, resolvió el edil. El arquitecto matizó que el grueso de la intervención en la avenida Pamplona son trabajos de canalización que está llevando a cabo la Mancomunidad y de los que también se beneficiarán los vecinos.

Sobre la paralización de las obras que se solicita en la moción (fue aprobada con 11 votos a favor y 10 en contra), López Iborra alegó que “el Ayuntamiento no puede paralizar las obras, menos cuando en 2002 no presentó alegaciones al plan general de Pamplona, donde ya se recogía este desarrollo urbanístico. Tampoco alegó cuando el Ayuntamiento de Pamplona aprobó el plan parcial en 2007. En estos casos -incide- se solicitaría al Ayuntamiento unos avales, porque paralizar una obra de este tipo puede suponer un prejuicio económico enorme para quien esté construyendo”. - Virginia Urieta