- El Ayuntamiento de Huarte está realizando trabajos para adecuar y reparar sus instalaciones deportivas. Antes de la pandemia la sociedad municipal Areacea licitó un pliego para la sustitución de la máquina enfriadora y productora de hielo de la Pista de Hielo, situadas en Itaroa. Las tres máquinas con las que contaba la instalación "se habían quedado obsoletas y con necesidades de reparaciones que se antojaban muy costosas y con una vida muy limitada", explicó el teniente de Alcalde de Huarte, Edorta Beltzunegi (EH Bildu). Sin embargo, a raíz de el confinamiento se paralizó la licitación, y los procedimientos se han activado con motivo de la nueva normalidad. "Esta demora ha supuesto que no diese tiempo para comenzar el 5 de octubre las actividades. Pero si no hay demoras, el curso 2020-21 comenzará el próximo martes, día 13", reconoció.

La máquina enfriadora ha supuesto un desembolso de más de 180.000 euros para la Sociedad Municipal Areacea, "con un plazo de ejecución desde julio hasta nuestros días. La máquina enfriadora se tiene que fabricar a medida para la instalación de Uharte, ya que este tipo de maquinaria no se fabrica en serie. Y para su colocación se utilizaron dos grúas de grandes dimensiones", detalla el teniente de alcalde. Una vez realizada la instalación de la máquina con sus correspondientes programaciones, se ha comenzado con la fabricación de hielos. El proceso "se va a dilatar unos días porque hay que ir encharcando la pista para que se vayan acumulando capas de hielo hasta formar el bloque necesario", concreta. Además, se ha pintado una pista de pádel "para realizar dos jornadas de exhibición a lo largo de la temporada. Esperamos que se animen todas aquellas personas a las que les gusta esta disciplina, y para aquellos que no las conozcan, que les llame la atención y quieran probar".

En cuanto a la cubierta de la piscina de Ugarrandia, la reparación se ha realizado en dos fases y comenzó en 2018. "El deterioro que mostraba, a pesar de las reparaciones menores que se realizaron desde 2015, solo se puede deber a la nula inversión que se realizó desde que se inauguró hasta la pasada legislatura", concretó Beltzunegi. En 2018 el Consistorio apostó por renovar toda la cubierta, "pero en dos fases, ya que la inversión total supera los 90.000 euros, con lo que la mitad del techo y sus rodamientos se sustituyeron por piezas nuevas". Estos días, en las obras de la segunda fase, se "ha cambiado la otra media parte, con lo que se ha completado la operación, dejando la instalación sin goteras y con un aspecto inmejorable al pintarse vigas y elementos visibles", finalizó.