Me refiero a nuestro Excelentísimo Ayuntamiento con el ya famoso tema de las banderas. Como sigamos por este camino, nos va a hacer falta todo el dinero del Banco de España, y tengo mis dudas de si llegaría para pagar todas las sanciones que nos pueden caer, pues no hay pocas banderas por el mundo para poner, y de toda índole.
Si no fuera el tema tan serio, sería para tomárselo a pitorreo. ¡Cuánta irresponsabilidad! Por no llamarlo otra cosa... ¡Qué fácil es jugar con el dinero de los demás! Si fuese suyo creo que se lo haría mirar o contarían hasta diez antes de tomar estas decisiones.
La gestión de la zona azul, a la vista salta, ha sido precipitada y muy mal gestionada, ya que se ha vendido la piel del oso antes de cazarlo. Se supone que antes de poner fin a la zona azul debería haber una alternativa ya preparada, pero va a ser que no, que se ha empezado la casa por el tejado.
No voy a decir que la opción elegida sea mala, pues no la hemos visto funcionar, y habrá que darle un margen de tiempo.
Por cierto, el dinero que se deja de ingresar, ¿de dónde va a salir, de las multas? O sea, que somos un Ayuntamiento rico, en fin.
¡Cómo se nota que llegan las elecciones! Parece ser que a todos los ayuntamientos les entran las prisas y quieren ejecutar en pocos días las obras que no han hecho en toda la legislatura. En pocos días vienen las elecciones y, utilizando el argot taurino, habrá que decir: suerte y al toro.
J. A. G.
No parece muy normal que en estas semanas de febrero y marzo esté habiendo tantos incendios, muchos de ellos en nuestra propia zona. Está visto que hay mucha gente que no ve el peligro que tiene hacer fuego en estas condiciones o si lo saben, es que les da igual poner el riesgo a los demás.
Dicen los que saben más que yo que mucha gente acaba de podar los olivos y demás árboles, y está haciendo fuego para quemar los restos de la poda, pero hay que ser muy precavidos. Ya llegarán otras fechas mejores, no nos arriesguemos por favor, que las consecuencias pueden ser muy graves.
Supongo que la sanciones será ejemplares, y si no lo son, deberían serlo para que nadie caiga en la tentación esa de hacer fuego. O quizá debería haber más policía vigilando estas cosas, no sé cuál sería la mejor medida a tomar.
Todos nos acordamos de incendios muy graves que hemos vivido en Navarra en los últimos años, como aquel que hubo un verano en Peralta y Tafalla que arrasó decenas y decenas de hectáreas, que tardarán muchos años en volver a estar como siempre. Y no hablemos ya si hay daños personales.
Mari
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