- Tras dos meses de ausencia en los órganos de Gobierno del Ayuntamiento de Estella-Lizarra, la sorpresa saltó en el Ayuntamiento el pasado día 8 de mayo cuando Navarra Suma registró una instancia en la que pedía el listado del personal del ayuntamiento, “si están llevando a cabo teletrabajo, trabajo de manera presencial o, por el contrario, no están llevando a cabo sus funciones laborales y, en el caso de no estar realizándolas, cuál es el motivo de ello”. Una instancia en la que exigía la relación de los trabajadores con permiso retribuido no recuperable y los motivos para no realizarlas. En contra de lo que este grupo municipal practica actualmente, al no asistir a las convocatorias de Gobierno, pedía información de los trabajadores con permiso retribuido recuperable y “cómo se va a llevar a cabo esa recuperación de las jornadas”. Además, insistieron en conocer “cómo se están desarrollando los servicios y la interlocución”, aspectos que este grupo puso en marcha en los primeros días en los que se estableció el estado de alarma.
Por otra parte, en su instancia telemática, pidieron conocer “cómo y cuándo se va a producir la reincorporación de los trabajadores a sus puestos de manera presencial y, finalmente, requirieron un informe sobre las tareas realizadas durante el estado de alarma, y más en concreto sobre los que “se han estado realizando desde el área de jardines”.
Desde el equipo de Gobierno mostraron su extrañeza por el interés que demuestra ahora Navarra Suma por cuestiones de control y fiscalización del trabajo de la plantilla municipal ya que, aseguraron, fue este grupo el que las impuso en su momento y “posteriormente ya no ha concurrido a los órganos de Gobierno desde que fueron apartados tras la moción de censura del 24 de marzo”.
Por un lado, fue Navarra Suma quien el 16 de marzo anunció el cierre de las oficinas municipales para atención al público y, al día siguiente, ordenó tanto el cierre de bares y centros de ocio, como el de todas las dependencias municipales de la ciudad.
Posteriormente, el exalcalde Gonzalo Fuentes dictó una resolución que facilitaba al personal modalidades de teletrabajo y autorizó las medidas de flexibilidad en la jornada laboral insistiendo en que “el personal al servicio de este Ayuntamiento deba permanecer en su domicilio durante los días que se establezcan para su correcto cumplimiento, éstos tendrán a todos los efectos la consideración de tiempo efectivo de trabajo”.
Precisamente la comisión de Personal del Ayuntamiento se reunió ayer, presidida por Koldo Leoz (EH Bildu) y contó con la presencia de los técnicos de riesgos laborales junto con el de recursos humanos, la representantes del comité de empresa y el jefe de Policía Municipal, Patxi Martínez. La representación política contó con Iban Crespo (PSN), Pablo Ezkurra (Geroa Bai) y Jorge Crespo (no adscrito), con la ausencia ya repetida de los representantes de Navarra Suma. Una reunión en la que se esbozaron algunos de los planes propuestos para la apertura presencial. Una apertura que tendrá lugar el próximo lunes 26 de mayo y en la que participarán en sus diferentes áreas, buena parte de los trabajadores municipales. Un plan que establecerá para esas fechas, tanto los turnos como la práctica de la cita previa con los vecinos; las medidas de seguridad (mamparas de seguridad en los mostradores de atención al público), así como la creación de diversos circuitos de acceso que recorrerán las diferentes ámbitos del Consistorio.
