En la disciplina cultural de la Tauromaquia hasta el rabo todo es toro. Con lo gélido de la temperatura y un vendaval continuo, a muchos les tentó marcharse tras la muerte del quinto. Hicieron bien porque la magia de la bravura y el arte pararon las deserciones y al mismísimo y gélido Eolo. La bravura la puso el sexto de la cinqueña corrida de Artalejo. Y la manufactura, más animosa y cómplice con los tendidos de sol, que de excelencias artísticas, la puso el brasileño de tez negra Igor Pereira. El animoso torero, vecino de Cantalejo (Segovia) cuajo a su manera a ese sexto que atendió a Cantarín, negro, número 4º, que fue premiado con la póstuma vuelta al ruedo. Un espadazo bajo al primer intento y de efecto rápido puso de acuerdo a todos para olvidarse de las penurias de la función y otorgarle con generosidad las dos orejas y la consiguiente salida a hombros. La necesidad de un torero modesto, como sus dos compañeros de terna, que se aferraba a los dos orejas para que retrataran su triunfo y se le abra alguna puerta de más plazas de toros. El torero, bien vestido de grana y oro, no tuvo opciones ante un vareado, débil y manso tercero.
Quien mostró las mejores maneras manejando el capote y muleta fue el ecuatoriano David Garzón. Torero con muy buena expresión y que protagonizó las tandas, al natural, mejores de todo el festejo. Lo hizo en su dos toros, justos de raza. Indudable mérito para una tarde tan difícil para el manejo de las telas. Ante al que abrió plaza alargó en demasía su labor y mató malamente, a punto de escuchar el tercer aviso. Al cuarto si lo cazó de una estocada desprendida y cortó una oreja.
El vallisoletano Darío Domínguez fue el menos destacado. No encontró manera de acoplarse bien con tanto viento, aunque sus toros fueron manejables.
4º festejo en Sangüesa y los hermoso en Olite
A partir de las 17.30 horas, en el coso zangozarra, novillada con erales de Ramos Valle para Joselito de Córdoba, Juan Bohórquez y José Arévalo. Y en Olite (17.30) cuatro toros de Rodrigues para Pablo Hermoso de Mendoza y su hijo Guillermo. Pablo se despide de Navarra. Ayer, lo hizo de Francia, cortando una oreja en el Coliseo de Nîmes.
Los toros
Emilio Artalejo. 6 toros, todos cinqueños. Desiguales de presencia y juego. Justos de casta, nobles, manejables. Muy manso y deslucido el 3º. Bravo en varas y en la muleta el 6º, premiado con vuelta al ruedo.
Los toreros
David Garzón. En el 1º, silencio tras dos avisos. Y en el 5º, oreja.
Darío Domínguez. En el 2º, silencio. Y en el 5º, silencio tras aviso.
Igor Pereira. En el 3º, silencio. Y en el 6º; dos orejas.
Las gradas
Presidencia. Bien a cargo de Jesús Calvo, asesorado por Francisco Garbayo y Pedro Oteiza.
Incidencias. Tres cuartos de entrada. Tarde muy ventosa y fría Una tarde más, y van tres, soberbia la Banda de Música. Saludó Otero tras parear al primero. Pereira salió a hombros del alguacilillo.