pamplona - El bar restaurante Iruñazarra se hizo ayer con la 3ª Semana de la Croqueta de Navarra de este 2019. Croquichampi es el nombre que le han dado a su croqueta ganadora distinguida por el jurado por su apuesta por un ingrediente sencillo con el que han logrado “una gran cremosidad y un rebozado crujiente”. Le siguieron en el podio Le Petit Comité y El Merca’o, con sus croquetas SonnyCroquet y Croquemar.

La propuesta de Iruñazarra ha estado en su barra de Mercaderes durante la semana del 3 al 12 de mayo, junto a las otras de los 104 establecimientos de toda Navarra que han tomado parte en el concurso.

Bajo el rebozado, Croquichampi tiene como ingrediente principal el champiñón de la variedad portobello. “Lleva también un poquito de queso y la masa es además de trabajarla bien está hecha con leche natural”, cuenta Jesús Mari Alcaiza Mateo, gerente de Iruñazarra. “Hemos ido directamente a las vaquerías a comprar leche para poderla trabajar y que estuviera en condiciones. Luego tiene un rebozado muy bueno de pan panko de maíz, otro pan de harina y nueces naturales”, describe. El secreto para una buena croqueta está en “trabajar la masa, que cueza bien y que la harina no se note. Hemos tenido la suerte de dar en el clavo pero es así, hay que poner un poco de cariño”.

Justo después de recibir el premio que les acredita como vencedores, Jesús Alcaiza cogió el micrófono emocionado para mandar una dedicatoria para Helena Aróstegui (jefa de Iruñazarra). “Es una persona que uno quiere tener siempre a su lado. Siempre está dispuesta y tiene un cariño entrañable”, expresa emocionado, también por la presencia de sus nietos en el acto. “Aunque está uno curtido del trabajo, esto da un poco de nervios y se te sube la tensión. Pero al final podríamos haber ganado todos los que estábamos aquí”, concluye.

otros premiados La Cooperativa de Hostelería de Navarra, organizadora del concurso junto a las asociaciones de comerciantes de Ensanche y Casco Viejo y Harinas Urdánoz, acogió ayer la final la tercera edición del concurso croquetero. El jurado compuesto por el cocinero con dos estrellas Michelín, David Yárnoz; los periodistas y escritores gastronómicos Josema Azpeitia, Jorge Sauleda y Sara Nahum, y la bloguera gastronómica Silbia Redondo, otorgó 6 nuevos premios y menciones entre los 16 finalistas.

El Premio a la Creatividad fue para el Bearán, el bar Izarra (Estella) ganó la Distinción al Mejor Punto de Fritura, la Distinción a la Máxima Cremosidad fue para Casa Lola (Tudela), la Distinción al Maridaje fue para Caravinagre. Y, por último, el jurado otorgó una mención especial al bar Zokoa por haber realizado una croqueta sin lactosa ni gluten. El Premio a la Croqueta Tradicional quedó desierto por decisión del jurado.