El Ayuntamiento de Pamplona mantendrá el programa de infancia y juventud Coworkids y lo va a hacer sin contar con las ocho asociaciones de los barrios que hasta ahora se habían encargado de gestionar este servicio municipal.

La decisión ha sido confirmada en el Pleno celebrado este jueves, donde se ha debatido una iniciativa de EH Bildu apoyada por Geroa Bai contra la eliminación de los equipos preventivos de los barrios.

Poco antes del debate, los grupos municipales han tenido conocimiento del recurso presentado ante el juzgado de lo Contencioso Administrativo contra el nuevo programa y por la modificación del decreto de organización municipal. El Ayuntamiento, ha acordado, con los votos a favor de Navarra Suma y PSN, comparecer en estas diligencias.

El recurso ha sido presentado por las asociaciones que durante años -en algún caso más de 15- se han encargado de gestionar este servicio: Asociación Bideberri de Mendillorri, Federación Batean de Rotxapea, Federación SinarZubi de Txantrea, Asociación Aldezar, Asociación Yoar de Arrosadia-Azpilagaña, Asociación Etxabakoitz Bizirik, Asociación Buztintxureando Txuri y Asociación Umetxea Sanduzelai.

Como sucediera el pasado 5 noviembre cuando los votos de Navarra Suma y los socialistas aprobaron el cambio del modelo, estas dos formaciones también han rechazado esta tarde la propuesta de EH Bildu y Geroa Bai en que se pedía la paralización del programa y licitar de nuevo los contratos de los ocho servicios preventivos de los barrios.

Joseba Asiron ha sido el encargado de presentar la iniciativa, criticando en términos muy duros la decisión de eliminar los equipos preventivos y alertando de los efectos que ha tenido en "la atención a la infancia en situación más desfavorable".

El representante abertzale ha reclamado una auditoría sobre los procesos de contratación del nuevo programa -ya hay un recurso presentado ante el TAN- y ha considerado que Coworkids "sólo se ha demostrado como una herramienta eficaz para que Navarra Suma lleve a cabo su venganza política contra los equipos preventivos, "colocando a dedo y sin procesos de selección reales a dos cargos afines a su estructura. Es otro chiringuito clientelar de la derecha".

Asiron ha criticado que haya comenzado el año "y como dijimos ni el nuevo servicio está en marcha, ni los planes anunciados cubren las necesidades de integración de quienes más lo necesitan".

Por parte de Navarra Suma ha intervenido la concejala delegada de Servicios Sociales, Acción Comunitaria y Deporte María Caballero, que ha acusado a Bildu de "insultar", "acosar" y "amedrentar" a "base de mentiras" al personal contratado para el programa de infancia.

En este sentido ha señalado que ya está operativa la estructura de Coworkids, integrada por un equipo directivo de 5 personas y 14 técnicos de integración social; y se ha detallado la programación y actividades del primer trimestre. "Es falso que el programa no exista. Está en marcha y va a funcionar".

La portavoz socialista Maite Esporrín se ha mostrado partidaria de dar una oportunidad al nuevo programa y valorar sus resultados pasado un tiempo. La concejala del PSN se ha mostrado muy crítica con la propuesta de Bildu y sobre las acusaciones con respecto a la ideología del personal contratado ha dicho que no es pertinente.

Esporrín ha lamentado el episodio que se vivió recientemente en San Jorge, donde un grupo vecinos exhibió pancartas y lanzó consignas contra las dos representantes municipales (la directora del área y la letrada) que habían acudido al barrio para explicar los detalles del nuevo programa de infancia.

El último en intervenir, el concejal de Geroa Bai Patxi Leuza, se ha referido al retraso a la hora de poner en marcha las actividades como se comprometió la concejala Caballero y ha señalado que contar con una estructura no es lo que mismo que esté funcionando.

Ha criticado que se decidiera suprimir los equipos preventivos de los barrios cuando era un servicio que llevaba funcionando muchos años y no cree que sea una buena idea aplicar los mismos programas a todos los barrios: "No tienen el conocimiento de los barrios y cada uno tiene sus propias necesidades. Estaremos vigilantes porque el Ayuntamiento no puede se permitir que este servicio funcione mal".