No suele ser lo habitual, pero de vez en cuando el vecindario consigue frenar los proyectos municipales que les perjudican y hacer valer sus intereses.

Es lo que ha sucedido con un aparcamiento para autocaravanas que el Ayuntamiento de Pamplona tenía previsto habilitar en la calle Donantes de Sangre en la Txantrea y que finalmente no se va a poner en marcha gracias al empuje de los vecinos de la zona y a una iniciativa planteada por la mayoría municipal.

Se ha materializado este martes en la Comisión de Presidencia donde se ha debatido una declaración consensuada por EH Bildu, PSN y Geroa Bai, que ha salido adelante con el voto en contra de Navarra Suma.

La propuesta aprobada urge al área de Seguridad Ciudadana a que paralice el proyecto y cumpla los términos del acuerdo de Comisión de Presidencia celebrada el 13 de abril de 2021.

En dicho acuerdo se pedía al equipo de Gobierno "realizar un estudio sobre las parcelas municipales que reúnan las condiciones para albergar un aparcamiento permanente para guardar autocaravanas".

Además, fijaba un plazo de tres meses para realizar dicho estudio y presentarlo ante la Comisión de Presidencia y reclamaba "mantener comunicación con asociaciones de usuarios de autocaravanas durante el proceso de estudio, decisión e implantación del aparcamiento, con el objetivo de escuchar sus aportaciones al respecto".

Durante el debate de este miércoles, el concejal de EH Bildu Endika Alonso ha reprochado al equipo de Gobierno la unilateralidad de sus decisiones y no haber tenido en cuenta la opinión de las asociaciones vecinales, de los dos 2 centros escolares de la zona y de los usuarios de las autocaravanas, que según ha dicho pidieron un espacio para guardar sus vehículos, no para aparcarlos.

Alonso ha aludido a los problemas de movilidad que se pueden generar en la zona, donde el tránsito de bicicletas es considerable por parte de los alumnos, y a los problemas de aparcamiento en un barrio en el que acaba de la implantarse la zona azul. "Han hecho las cosas como siempre, sin hablar con nadie. Vinieron aquí con una idea y ahora se han encontrado con que el lugar no es el adecuado para nadie. En la Txantrea llueve sobre mojado", ha señalado Alonso.

Por último, ha hecho alusión a los problemas de ruido, tráfico y contaminación que pueden generarse en una zona hasta ahora tranquila.

Por parte de Geroa Bai ha intervenido Patxi Leuza, que ha cuestionado la capacidad del Ayuntamiento para solucionar problemas y ha lamentado su falta de diálogo.

El representante de la formación progresista ha reconocido que el aparcamiento de las autocaravanas supone un problema y que es necesario encontrar soluciones.

"Hay que buscar consensos y desde luego este no es el camino, no hay que tener en contra a los vecinos, que ya se han posicionado contra este proyecto" ha indicado Leuza.

Maite Esporrín (PSN) también se ha referido a la falta de diálogo del equipo de Gobierno pese a encontrarse en mayoría y ha pedido paralizar el aparcamiento de autocaravanas en la calle Donantes de Sangre por no ser el adecuado.

Javier Labairu, concejal delegado de Seguridad Ciudadana, ha esperado a que intervinieran los tres portavoces de la oposición para tomar la palabra, aprovechando para lanzar un par de alusiones a las protestas en el barrio que hubo en el barrio por la reciente implantación de la zona azul.

Ha comentado que el proyecto afectaría a 100 plazas de aparcamiento y que se reunió con los vecinos una vez conocida su oposición al proyecto.

El edil de Navarra Suma también ha reconocido que la comunidad educativa de los centros escolares de la zona le habían trasladado su preocupación por el efecto del parking en la seguridad vial (la intervención contempla eliminar uno de los carriles): "Vamos a tener esto en cuenta, pero desde luego no porque lo digan ustedes", ha señalado Labairu aludiendo a los portavoces de Bildu, PSN y Geroa Bai.

La propuesta del Ayuntamiento era habilitar un aparcamiento de larga duración para los usuarios de autocaravanas cerca de la calle Capuchinos, en la línea norte de aparcamiento de la calle Donantes de Sangre, una vía con dos carriles. Se dejaría solo uno para generar plazas de mayor dimensión aptas para autocaravanas y sería de uso exclusivo para vecinos y vecinas de Pamplona.

Funcionaría como el resto de zonas naranjas, con la diferencia de que no tendría el límite de 9,5 horas diarias, sino un plazo máximo de tres semanas. Las dos primeras costarán a 1 euro la hora y a partir de esa segunda, a 0,30 euros. Solo se computarán en el pago las horas que coincidan con el horario ordinario de la regulación de la ORA. El precio de ese máximo de tres semanas será de 49,10 euros.