ajo un sol de justicia, Haize Berriak & Mielotxin ofrecieron ayer en Altsasu un animado concierto de música popular con canciones de toda la geografía navarra y música folk con aires sinfónicos con la que disfrutaron las numerosas personas que se acercaron al mediodía a la explanada de Iortia. Y es que este espacio, más amplio que la plaza de Los Fueros, ha sido el elegido para la programación cultural de este verano diferente con el fin de cumplir las medidas sanitarias para evitar la propagación de la covid-19. Como en el escenario la banda no se podía respetar la distancia social, tocaron a pie de calle, mientras que los cuatro músicos de Mielotxin tuvieron más suerte y lo hicieron a la sombra sobre el escenario.

Lo cierto es que en las fiestas de Altsasu no suele faltar un concierto de Haize Berriak y en un principio este año no iba a ser diferente. Como suele ser habitual, querían sorprender a su público y aceptaron la invitación de participar en el proyecto conjunto de la Federación de Bandas de Navarra y el grupo de folk Mielotxin. “Era un repertorio nuevo para la banda y pensamos que podía encajar en el concierto de fiestas”, apuntó David Sánchez, el nuevo director de Haize Berriak. Si bien la pandemia lo cambió todo, este concierto siguió adelante. “Vimos que había la posibilidad de hacerlo e intentarlo”, observó. “Se necesitaba volver a la calle y lo hemos hecho con responsabilidad. La cultura es necesaria, pero los vecinos y vecinas deben saber que no son fiestas”, añadía.

Así, en cuanto pudieron se pusieron a preparar el repertorio, 17 temas adaptados a banda que repasan la trayectoria de Mielotxin. Y es que a Haize Berriak le encantan los desafíos. “Es una banda a la que le gustan los proyectos diferentes y que siempre se pone nuevos retos. No se queda en su zona de confort”, destacó Sánchez, que asumió oficialmente la batuta de Haize Berriak el pasado diciembre.

Así, ayer se pudo disfrutar de diferentes canciones como Empápate, Zortziko de Baztan o una jota muy especial compuesta por Ángel Iriarte, más conocido como Potaje, un acordeonista, letrista y compositor autodidacta de Altsasu ya fallecido que encarnaba como pocos a aquellos músicos de los pueblos que pusieron color en los años grises de la posguerra. Al respecto, Iñigo Aguerri, cantante de Mielotxin, recordó que este tema lo incluyeron en su segundo disco, y también participaron el homenaje a Potaje en 2009 que promovió Trasteando taldea. En el concierto de ayer, además, hubo bailes con dantzaris de Lauarin.

Era el segundo concierto de Haize Berriak de este verano en Altsasu, después de que el 24 de julio ofreciera un viaje por músicas del mundo, también dentro de este programa especial. “Por la pandemia no pudimos hacer el concierto con las escuelas de música, que es muy importante por su servicio pedagógico y también porque atrae a nuevos miembros”, señaló el director. “Ahora estamos 30-34 músicos pero en algunos instrumentos hay pocos, por ello es importante que haya nuevas incorporaciones”, incidió. Por ello, realizó un llamamiento al alumnado de la Escuela de Música y también a antiguos miembros de Haize Berriak.

Así, con música, y por la tarde con el mayor espectáculo del mundo de la mano de Vaivén Circo finalizó la programación de verano organizada por el área de Cultura en un entorno seguro, con más de una veintena de propuestas para todos los públicos.

El horario de invierno volverá a Iortia este próximo miércoles, cuando la biblioteca abra a la tarde, de 14.00 a 20.00 horas y la taquilla del centro cultural de 12.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.30 horas. La reapertura del cine será el 24 de septiembre con la proyección de la segunda entrega de la película Padre no hay más que uno, de Santiago Segura. La programación de cine fórum y familiar arrancará la primera semana de octubre. Los abonos y entradas sueltas para la temporada de otoño ya están a la venta.