- El colectivo Ecologistas en Acción exigió ayer que las empresas que causen daños medioambientales paguen las consecuencias, como ocurre con el parque eólico Cavar, ubicado en la Sierra del Yugo (Valtierra y Cadreita). Según denunciaron en los 8 meses que lleva en funcionamiento este parque han muerto, como consecuencia de la presencia de los aerogeneradores, un total de 112 aves. Entre las afectadas están 80 buitres, 1 milano real, 1 milano negro, 1 águila calzada, 3 cernícalos comunes, 1 aguilucho lagunero, 1 gavilán, 1 busardo ratonero, 10 pájaros pequeños (golondrina, calandria, jilguero….) y 13 murciélagos “y eso sólo es lo que se ha encontrado, ya que otros muchos han podido desaparecer depredados o no se han registrado”.

Los datos de fallecimientos han sido facilitados por el Gobierno de Navarra, sin que hayan tomado medidas al respecto. “Nos sorprende e indigna que el valor económico de todas estas especies protegidas, una de ellas en peligro de extinción como el milano real, no será reclamado a la empresa que lo construyó y gestiona”. La cuantía ascendería casi a 60.000 euros, concretamente 59.220 euros.

Por ello piden al Gobierno de Navarra que aplique la Ley de Responsabilidad Medioambiental, para cobrar ese valor a las empresas tanto de producción de electricidad en los parques eólicos como de distribución de la electricidad. Una valoración que aún aparecen en la ley en pesetas.