ueridos amigos y amigas. Lamentamos mucho comunicaros que nuestro gran y querido artista Camilo Sesto nos acaba de dejar. Descanse en paz”. La cuenta oficial de Twitter de Camilo Blanes Cortés, su nombre real, se tiñó de luto el domingo 8 de septiembre de 2019 con la noticia del fallecimiento del popular músico valenciano. Los últimos años del autor de ‘Vivir así es morir de amor’, su gran himno, fueron bastante tristes. Vivía solo en su casa de Torrelodones, Madrid, ajeno a los escenarios y la televisión, donde se hablaba más de su condición sexual, de sus problemas con el alcohol y de las operaciones estéticas a las que se había sometido, que de un cancionero que triunfó por todo lo alto durante la segunda mitad del siglo XX. Coincidiendo con su 70 cumpleaños, en 2016, Sony decidió publicar la enésima antología del músico, compositor y productor con un total de 60 temas que recogen una parte del gigantesco legado del cantante, extremadamente prolífico entre los años 70 y la primera mitad de los 80, prácticamente a disco por año.

El amor desatado y romanticismo extremo de ‘Algo de mí’, de 1971, le dieron su primer número 1. Su último trabajo fue ‘Camilo Sinfónico’, en 2018, otra vuelta de tuerca de sus éxitos de siempre grabado con la orquesta de RTVE y con colaboraciones del mainstream mejicano (Carlos Rivera, Yuri, el grupo Pandora) y español (Marta Sánchez, Pastora Soler, Ruth Lorenzo y Mónica Naranjo). El álbum sonaba a despedida. Se presentó en el photocall del Florida Park de Retiro de Madrid junto a algunas de sus artistas colaboradoras, posó para los fotógrafos y se marchó sin atender a los medios. La presentación se evaporó como la promoción del disco, que no llegó siquiera a estrenarse en directo.

Tras 50 años de carrera musical, decenas de producciones discográficas, y entre 70 y 100 millones de discos vendidos en todo el mundo (las cifras bailan dependiendo de la fuente consultada), el artista había esquivado la muerte solo un mes antes, cuando estuvo ingresado en el hospital por un cólico renal. En 2001 ya había superado con éxito un trasplante de hígado, mientras que los dolores en un pie fueron constantes en la recta final de su vida. Su delicado estado de salud empeoró y los problemas renales le condenaron a un desenlace irreversible en la Clínica Quirón de Pozuelo de Alarcón. Cuando a Camilo Sesto se le acababa el tiempo, su reconocimiento comenzaba a florecer desde ámbitos muy distintos, empezando por su pueblo natal, Alcoy, donde fue nombrado hijo predilecto y le dedicaron una avenida en su 70 cumpleaños.

Guille Milkyway, el hombre detrás de La Casa Azul y de varios éxitos de Fangoria, también reparó en su figura desde el prisma de la música pop independiente. En 2018 remezcló el tema ‘Vivir así es morir de amor’, del disco ‘Sentimientos’, justo 40 años después de su lanzamiento. La reinterpretación de una canción tan icónica no podía ser más acertada: mantenía el espíritu de la grabación original, pero le añadía los característicos toques festivos de La Casa Azul, en la línea de ‘La revolución sexual’. La diva argentina Nathy Peluso también versionó a Camilo Sesto y su “por amor tengo el alma herida” a finales del año pasado. El estilo apasionado y a flor de piel del intérprete puede recordar a otros baladistas actuales como el donostiarra Álex Ubago.

Por trayectoria, éxitos cosechados y popularidad, Camilo Sesto juega en la misma liga que Julio Iglesias, Raphael o Nino Bravo.

Son palabras mayores de la cultura popular. Llevó su arte más lejos que ninguno de ellos. En 1975 lanzó su sexto álbum, una arriesgadísima ópera rock titulada ‘Jesucristo Superstar’. La gira teatral fue costeada de su propio bolsillo (se habló de 12 a 15 millones de pesetas) y logró escapar de la zarpa de la censura con un enorme respaldo de público.

La comedia musical impresionó a los creadores originales de la obra, Tim Rice y Andrew Lloyd, y lo emparentaron con la producción estadounidense. Recientemente, la plataforma Atresplayer anunció una serie de ficción de cuatro capítulos titulada ‘Jesucristo Superstar’ en la que se aborda la manera en que la obra cambió el concepto del espectáculo teatral durante la agonía franquista. ‘Getsemaní. (Oración del huerto)’ era uno de los temas más queridos del repertorio de Camilo Sesto; el público siempre aguardaba con emoción el momento de su interpretación en directo.

Antes de que se apagase su estrella, los primeros años 80 también fueron suyos. Al otro lado del Atlántico no paró. Fue un artista internacional. Se mudó a Los Ángeles, tocó en el Madison Square Garden, salió en la BBC cantando en inglés y con la presentadora rendida a sus pies... De esta época es ‘Perdóname’, otro éxito imperecedero y carne de karaoke desde hace 40 años hasta el día de hoy.

“En mis auriculares escucho ‘Los Chikos del Maíz’, Andrés Calamaro o Betagarri”

“Me encantaba Camilo Sesto, el all-star de mi época y mi canción favorita “Still loving you”, de Scorpions”