En 1974

Los parroquianos habituales de los bares de chiquiteo de Pamplona comentaban con pena el cierre de un antiguo establecimiento hostelero, el bar Espejo. En el lugar había existido, hacia 1910, un local regentado por los hermanos Aldaz, donde se fabricaban gaseosas y se vendían vinos y aceite, y posteriormente la misma familia abrió la famosa taberna. Allí, entre otros muchos personajes pintorescos, reinaba un célebre limpiabotas, llamado Miguel Goñi Goñi, pero al que todo el mundo conocía por el sobrenombre de “Zurikaldai”. Un día no muy lejano tendremos oportunidad de glosar las andanzas de este curiosísimo tipo en la serie “Vidas Ejemplares”, queda prometido.

En cuanto a la foto, fue obtenida por Eusebio Mina el 12 de abril de 1974, y la tituló “Bar Espejo que desaparece”. En ella vemos, aparcados ante la puerta cerrada del bar, un Seat 850, un Seat 850 “coupé”, un Renault 12 y un motocarro de aquellos que usaban los panaderos...

Cierre del bar Espejo en la calle Ciudadela, 1974

Hoy en día

El paisaje urbano retratado hace 50 años permanece perfectamente reconocible y, aunque la presencia de una terraza nos ha obligado a cambiar el ángulo de la foto, los detalles de los edificios permiten identificar, sin ningún género de dudas, ambas imágenes. El local del antiguo bar Espejo ha pasado por diferentes avatares en las últimas décadas, incluyendo una breve reapertura del propio bar, con el mismo nombre. Fue así como lo reprodujimos, en esta misma serie, en septiembre de 2017. Ya recientemente, en 2021, el local hostelero ha abierto de nuevo, con una hamburguesería americana.

Y volviendo a aquel lejano 12 de abril de 1974, fecha en que se obtuvo la fotografía antigua, vemos que la prensa daba cuenta de una acción palestina en contra de la ocupación de su patria a manos israelíes, que había finalizado con la muerte de todos los guerrilleros palestinos. Y es que, como tantas veces repetimos, no hay nada nuevo bajo el sol...