Recientemente hemos podido ver con vergüenza y sin saber dónde poner la vista la escena patética de varias personas afectadas por ELA, familiares y allegados en su reunión acordada con parlamentarios de España.
Acudían al Congreso a recordar que queda pendiente de cumplir la promesa reiterada de aprobar y poner en vigor una Ley que atienda sus necesidades y apoye el mejor desarrollo posible de su vida. Por lo manifestado en la reciente e innecesaria modificación por unanimidad de la Constitución cualquiera podría pensar que esos Diputados están completamente mentalizados, comprometidos y dispuestos a dar lo mejor de sí mismos por atender las necesidades de esos ciudadanos. Pero, oh sorpresa, asisten únicamente cinco cuando son unas 450 las autoridades interpeladas por el tema.
La falta de interés, visto lo exigüo de la asistencia, y desprecio al esfuerzo realizado por los interesados, ha sido un chasco, una indignidad y un trago doloroso más a pasar por el colectivo afectado que les ha causado indignación. Los parlamentarios han demostrado que tal vez no son gente de fiar del todo pues les da igual prometer y aprobar lo que sea que luego ya veremos.
Pero esto no ha sido lo peor. Nadie que yo sepa ha recogido la indignación generada, nadie ha llamado a Juan Carlos Unzué, nadie ha pedido disculpas ni asumido públicamente el vacío causado. Nadie del Gobierno ni nadie de ningún gobierno ni partido político que yo sepa. Qué quieren que les diga, sencillamente no hay derecho a causar semejante humillación. Si lo hubieran hecho adrede no podrían haberlo hecho peor.
Y sin embargo, hay todavía más. Tampoco he visto ni uno solo de los colectivos de todo tipo de minusvalías, y no me hagan alusiones al nombrecito, que haya manifestado su indignación con los políticos. Se supone que son colectivos mentalizados y solidarios con todo tipo de minusvalías y que tienen que apoyar las iniciativas de cualquiera de sus asociaciones que buscan y necesitan las atenciones propias de cada caso. Pero donde están?.
Discapacitados físicos, psíquicos, visuales, auditivos, ONCEs, IMSERSOs, ANFASs, y tantas y tantas. Dónde están?. Es que no tienen capacidad de enterarse de las cosas y valorarlas en su esencia y emplear parte de su tiempo en apoyar todo tipo de iniciativas de atención a problemáticas similares a las suyas?. Y a manifestar su indignación por el desprecio absoluto de los parlamentarios hacia uno de ellos?.
Vamos Juan Carlos, por mi parte no puedo más que manifestaros mi apoyo, ayuda y comprensión personal hacia vuestra problemática que es la de todos e intentar movilizar conciencias más atentas y comprensivas que las de nuestros parlamentarios y daros enormes gracias por vuestras iniciativas y movilización.
No os canséis de hacer el bien.
