Tras meses de conflicto laboral con unas consecuencias muy lesivas para los/as trabajadores/as de TCC MOVENTIS, somos varios/as a los que nos ha sucedido algo cuando menos llamativo. 

En mi caso, como en el de otros compañeros y compañeras, este conflicto ha pasado una factura mental y anímica importante. Motivo por el cual, tras una asistencia a Urgencias y cita con mi doctora de cabecera, se me dio la baja laboral. Seis días después de esto, recibo una llamada del INSL a petición de la empresa TCC MOVENTIS para valorar, vía citación con un inspector, si esta baja médica es justificada. 

Nada que increpar al inspector de trabajo porque está haciendo su labor, pero sí que es llamativo que tras una baja médica que la da una doctora facultada para ello, la empresa pueda hacer uso de una institución pública para ejercer presión y poner en duda si una baja es justificada o no

Hace pocos días se publicaba que este pasado mes de junio el tiempo medio de espera para una consulta con un especialista en Navarra es de 75 días. En cambio, a los 6 días de que te den una baja médica, el INSL te llama a petición de una empresa privada para que justifiques si tú baja es real o no.

Como digo, son datos que llaman la atención. Por parte de la empresa nada que objetar, ya que las personas que conformamos la plantilla hemos sido meros número desde el principio, pero el sistema ojalá pusiera más medios para que aquellas personas que están de baja se recuperasen o tuvieran atención médica con la misma premura que tienen para estas peticiones de las empresas, que el único fin que tienen es presionar y forzar la reincorporación lo antes posible a tu puesto de trabajo sin valorar tu estado de salud.

Cabe recordar que el tratamiento más justo de las bajas es una de las principales peticiones en esta negociación de convenio. Los tres primeros días no cobramos nada y los siguientes se cobra entre un 60 y un 75% por lo que evidentemente no es plato de buen gusto una pérdida de salario tan importante por estar incapacitado para realizar tu trabajo. 

En estas revisiones del INSL, a varios/as trabajadores/as se nos ha invitado a reflexionar sobre la búsqueda de otro trabajo o dejar la labor de delegados sindicales si esto nos genera un estrés como para estar de baja. Hay que recordar que mucho del estrés y de las circunstancias que han generado ciertas bajas son consecuencia de las condiciones laborales y de la conflictividad que se ha vivido en los últimos tiempos. Nunca se han utilizado las bajas como medida de presión ante la negociación y es lamentable que se sugiera que esto podría haberse dado, sin ningún tipo de prueba. 

Durante este conflicto laboral nos hemos visto ninguneados por las administraciones, nos hemos visto vulnerados de nuestro derecho a huelga por unos servicios mínimos abusivos, y ahora, tras caer de baja algunos compañeros y compañeras, volvemos a ver cómo la empresa sí que hace uso de sus maniobras de presión ahora poniendo en cuestión si estás de baja justificada o no. Una vergüenza.