a Formación Profesional para jóvenes a través del sistema dual se empezó a poner en marcha en 1997 a través de la Cámara de Comercio de Navarra y el Departamento de Educación, Trabajo e Industria con sus respectivos directores y consejeros.

En el año 1999 se realizó la primera feria de formación del dual y estuvo 3 días con más de 30 oficios presentes y fue un éxito total con 10.000 personas por día que visitaron la feria, por ello se realizó de nuevo en 2001 y en 2003 con el mismo éxito. Nunca debimos haber dejado el sistema dual después de que fuimos pioneros en España y el gran esfuerzo que se realizó para poder sacarlo adelante. En Navarra, el sistema dual se puso en marcha otra vez en el año 2012 pero no la manera original, la que vimos que funciona. La formación que hay ahora en España no funciona porque no reduce el paro juvenil tan elevado que tenemos del 38 al 40 por ciento. Tenemos que implementar el verdadero sistema dual, el que funciona de verdad y la muestra está en los demás países como Alemania, Francia y Finlandia que tienen el 0,5 a 0,6 por ciento de paro juvenil. Mientras no se cambie, seguiremos con el mismo paro entre los jóvenes. Algunas personas se empeñan en decir que el sistema dual en España está bien pero yo les invito que comparen ustedes el resultado del paro juvenil en otros países.

En mi opinión se tendría que controlar el porcentaje de universitarios y el porcentaje de maestrías y grados superiores con la Formación Profesional y tendríamos que llegar a un equilibrio del 50/50 entre universitarios y otras carreras de formación. Hoy en día hay personas que creen que la formación es el último recurso y les puedo asegurar que no es así. Si implantáramos el sistema dual con las 300 horas de prácticas para luego realizar un grado superior, esto no envidiaría a ninguna otra carrera y lo pueden comprobar. El 74 por ciento de empresas pymes que tenemos en este país incorporarían a estas personas y conseguiríamos quitar a muchos jóvenes de la calle para que trabajen y coticen en la Seguridad Social y más teniendo en cuenta que quien no cotice 40 años lo tiene bien crudo para su jubilación. Para conseguir esto tenemos que cambiar el tipo de formación de hoy en día porque con los años que llevamos fracasando ya es hora de solucionarlo y dejar de tapar parches que no dan ningún resultado.

En España, actualmente, el alumno asiste el primer y segundo año al centro educativo y en verano realiza prácticas en alguna empresa, 340 horas y cuando termina las prácticas muchas veces se da cuenta de que no es lo que pensaba y lo deja. Durante ese tiempo no ganan dinero. Según muchos centros de formación, gran parte de esos chicos cuando comienzan a estudiar o trabajar, abandonan. No hay más que ver cómo está el paro juvenil. Gran parte de esos jóvenes terminan en fábricas haciendo de todo menos lo que estudiaron.

Cuando un alumno termina los dos años de formación si la empresa lo quiere contratar le tiene que pagar 1.120 euros al mes con 340 horas de experiencia, que no es nada. Las empresas creen que no está preparado y no le pueden pagar este jornal porque por 1,564 euros, un poquito más, pagan a un oficial. Por eso las empresas tienen autónomos, les sale más rentable. Si el autónomo trabaja cobra y si no trabaja no cobra. En cambio, si tienen un alumno, deben enseñarle y a los dos años se va a una fábrica donde estará 8 horas seguidas. Si las pymes no se preocupan de tener buenos oficiales se perderán los oficios y tendrán que comprender que no hay nada gratis y todos tienen que apoyar la formación de una forma u otra si quieren que sus empresas funcionen.

En otros países como Alemania, Francia y Finlandia la formación dual solo tiene un 0,5 por ciento de paro juvenil. Esa es la que deberíamos implantar en España, lo antes posible. En total son tres años de oficio: en cada uno de ellos, el 60 por ciento del tiempo el estudiante está en la empresa el 40 en el centro educativo. Como ejemplo, en Alemania el jornal base es de 1.532 euros, el alumno cobra el 60 por ciento del jornal y como está el 60 por ciento en la empresa realiza un promedio de unas 1.030 horas por año. Al final de sus estudios son más 3.000 horas de oficio y sale totalmente preparado. Está comprobado estadísticamente que todos se colocan, solo hay un 0,5% de paro. Además, como desde el primer año asiste a la empresa, si el primer año se da cuenta de que no es lo que quiere hacer, perderá el año, pero al siguiente año podrá empezar a estudiar lo que verdaderamente quiere hacer. Por ejemplo: si una familia de trabajadores tiene dos hijos o hijas en casa sin trabajar, en este tipo de formación los tendría ganando algo de dinero, al mismo tiempo que se van formando a futuro en un oficio. Por lo menos ganan algo para sus gastos y no están en casa sin hacer nada y además cotizan mientras se preparan para ser profesionales en el gremio que eligieron. En los oficios, por ejemplo, con tres años en los centros tienen tiempo de enseñarles interpretación de planos, dibujos por ordenador, dibujos a mano alzada, realizar presupuestos y trato al cliente.

Entiendo que todos no opinamos igual, pero los jóvenes son el futuro de los países y si no les atendemos y no les damos una buena formación, de la manera que lo estamos haciendo, no los podremos colocar. Todos sabemos que las pymes son el 74 por ciento de las empresas y hay asociaciones empresariales de todos los oficios. Éstas deberían tener más comunicación con la Cámara de Comercio, el Gobierno y el Departamento de Educación para conocer las necesidades de cada oficio. Por ejemplo, los centros educativos se deberían reunir con los presidentes de los oficios y la Cámara de Comercio para saber hacia dónde va el mercado y preparar a los alumnos hacia las necesidades que demandan las empresas, ya que finalmente son ellas las que los emplean. Además, deberían implicarse más las empresas para tener buenos alumnos pues de lo contrario se acabarán perdiendo los oficios. Por ello habría que hacer estudios para saber cuántos alumnos están dispuestos a emplear las empresas y saber qué cantidad se pueden colocar todos los años en empresas y gremios. Los centros educativos son siempre necesarios para todas las empresas, todos los operarios se deberían reciclar constantemente porque el mercado lo exige. Por eso, a las tardes, se emplean los centros educativos para que tanto alumnos y trabajadores se reciclen y realicen grados superiores.

Hay que esforzarnos más para formar a los chicos y chicas españoles como merecen para erradicar el paro juvenil que tenemos actualmente. En Navarra, el 74 por ciento de las empresas son pymes y creo que la administración no dedica mucho tiempo para saber cómo funcionan. Las pymes son una buena fuente para la economía de Navarra y por supuesto necesitan el apoyo del Gobierno. Además, tenemos centros educativos extraordinarios como Salesianos, Donibane, Virgen del Camino, la ETI en Tudela y varios más. Debemos reconocer que de estos centros salen grandes operarios y empresarios. Por desgracia, muchos universitarios y estudiantes de formación tienen que salir a otros países a trabajar de lo que sea, por no tener trabajo aquí. Ya es momento de prestar atención a este tipo de Formación Profesional para erradicar el paro y dar oportunidades a jóvenes que quieren trabajar y estudiar al mismo tiempo. Una manera de formarlos mientras estudian y dándoles, a la vez, la oportunidad de ganar algo para sus gastos personales.

Esto se lo cuento desde la experiencia que durante años he vivido como expresidente de la comisión de Formación Profesional en la Cámara de Comercio de Navarra, exvocal de la Confederación de Empresarios de Navarra, exvocal del Consejo Superior de Formación Profesional del Gobierno de Navarra, empresario de una empresa de carpintería ebanistería, exvocal del Consejo de Cámaras de Oficio de Madrid, fundador de la Asociación de Carpinteros Ebanistas de Navarra ACEN y uno de los pioneros en implantar el sistema dual en Navarra y España.