En Estella-Lizarra llevamos demasiado tiempo escuchando que los presupuestos municipales “son habas contadas”, que “no hay margen”, que “no se puede hacer más”. Pero no se trata de cifras, se trata de visión, de ambición, de voluntad política. No es el presupuesto lo que limita, es la falta de un verdadero proyecto de ciudad.

Desde el Partido Socialista de Estella-Lizarra demostramos, con hechos, que sí es posible avanzar, que sí hay margen cuando hay compromiso. En 2024 impulsamos casi medio centenar de enmiendas, todas ellas con un objetivo claro: mejorar la vida de nuestros vecinos y vecinas. Apostamos por la rehabilitación del Casco Antiguo, por el comercio local, por el medioambiente, la cultura, el turismo, la igualdad, los derechos LGTBI+, los servicios sociales, el cuidado de los barrios… Apostamos, en definitiva, por una Estella-Lizarra del siglo XXI.

Pero llevamos demasiado tiempo en el que el “y tú peor” arrastra a Estella-Lizarra a una suerte de agonía permanente, anclada en bucles infinitos de asuntos enquistados que se repiten pleno a pleno, año tras año.

Entendemos la política desde la valentía y la esperanza de una ciudad mejor. No se nos puede tachar de irresponsables a quienes, asumiendo un desgaste político por intentar mejorar la vida de nuestros vecinos y vecinas, y viendo el incumplimiento de otros, decidimos dar un golpe sobre la mesa. Ser contundentes no es bloquear: es ejercer con responsabilidad y orgullo la representación pública. Es defender un proyecto con alma, con futuro, con Estella-Lizarra en el centro.

Sabemos que el diálogo entre diferentes es necesario y estamos abiertos a ello, pero también sabemos que no todo vale. No vale prometer y no cumplir, como ha hecho UPN. No vale negociar para luego recortar. No vale llevar propuestas sin acuerdo o negociación. La ciudad no puede esperar más.

La política de pancarta o de trinchera es igual que la política de incumplir la palabra. Ambas dejan de ser útiles para la ciudadanía; ambas perjudican los intereses de los vecinos y vecinas, ya que no son capaces de avanzar. Tan importante es la crítica y la discrepancia de modelo como saber cómo sacar adelante las propuestas.

Desde el Partido Socialista no nos situamos en ninguna posición de bloqueo. Tenemos un proyecto propio que ha demostrado ser útil y capaz de desbloquear lo que otros han enquistado. Pero si somos críticos, nos llaman irresponsables; si llegamos a acuerdos, es que nos hemos vendido. Este es el discurso continuo por el que Estella-Lizarra lleva tantos años estancada. Ese frentismo es lo que Estella-Lizarra no merece.

Solo se ejecuta en torno al 80% del presupuesto municipal, es decir, entre 2 y 3 millones quedan sin ejecutar. UPN asumió en 2024 un remanente de 7 millones que no se ejecutó en la anterior legislatura. Esto es síntoma de que hay algo que no funciona, consecuencia de la falta de proyecto.

Estella-Lizarra necesita recuperar el orgullo. Necesita volver a soñar. Y desde el Partido Socialista proponemos un modelo político para gestionar con cabeza y con corazón, para poner cada euro al servicio del bien común. Optimizar los recursos, ser eficientes, apostar por el empleo, la sostenibilidad, la innovación y el desarrollo económico: ese es nuestro camino.

No se trata de gobernar por gobernar. Si no se tiene proyecto de ciudad o se vive de las rentas de lo que no se hizo, seguiremos en la misma casilla de salida.

Lo dijimos y lo seguimos diciendo: no se trata del con quién, sino del para qué. El Partido Socialista se presentó con más de 300 medidas concretas a desarrollar, propuestas que hemos intentado sacar adelante con quien ha tenido la voluntad. Vemos algún resultado, como la pista de atletismo o la pasarela en la Chantona, a la espera de ejecución.

La acción del Partido Socialista es la que es: incansable, abierta y que reconoce nuestra pluralidad, responsable pero realista. Son quienes han ostentado y tienen la responsabilidad actual de asumir la alcaldía quienes deben responder por qué, teniendo mayoría, prorrogaron presupuestos; por qué quienes están en minoría no dialogan. La acción de gobierno supone asumir lo bueno y lo malo de la responsabilidad política; no es una carta blanca para una foto cada cuatro años.

*Firman esta carta: María Sanz de Galdeano e Ibai Crespo Luna Grupo Municipal PSN-PSOE del Ayuntamiento de Estella-Lizarra