2025 ha sido un año redondo para EAJ-PNV en Nafarroa por haber cumplido 115 años de presencia en esta tierra. El momento se sitúa en la creación en junio de 1910 del primer Centro Vasco en la plazuela de San José en Iruñea. Han sido 115 años de consolidación de un proyecto político centrado en las personas de este país y en su derecho a decidir libremente su futuro. Una historia centenaria de resistencia, dignidad y también de orgullo protagonizada por las mujeres y hombres jeltzales que nos han precedido.

Precisamente esta semana se ha celebrado uno de los primeros hitos de esta historia centenaria del partido en Nafarroa: la creación del primer Napar Buru Batzar, la ejecutiva territorial, el 17 de diciembre de 1911. Un órgano que tuvo como presidente a Estanislao de Aranzadi y como vocales a Serapio Esparza, José Lampreabe, Rafael Amichis y Ataulfo Urmeneta. Se produjo un año después, hace 114 años y constituye una oportunidad para recordar de dónde venimos, reafirmar a dónde queremos ir y recordar nuestra propia memoria histórica como organización política con orgullo.

Orgullo de ser abertzales en Navarra, sin complejos y sin escondernos, y de trabajar día a día –a veces en las duras y adversas circunstancias que tiene la política– por algo tan respetable como es la defensa de la identidad vasca de nuestro pueblo, de nuestras raíces y de nuestra lengua, el euskara, la lingua navarrorum. Orgullo de ser navarros y, como navarros, de ser vascos.

Toda una trayectoria caracterizada por la defensa de la democracia y los derechos humanos. Otro motivo de orgullo. Siempre en contra de la violencia y siempre en contra del fascismo y del totalitarismo. EAJ-PNV siempre ha estado frente al franquismo, frente al terrorismo de ETA y frente a todas las violencias que lamentablemente hemos tenido que sufrir en este país en todas estas décadas. Con violencia no se construye. Y la historia de Euzko Alderdi Jeltzalea-Partido Nacionalista Vasco es una historia de trabajo y compromiso por una construcción nacional que destierre el rencor y el odio. Que no olvide a quienes han sufrido la violencia por defender unos ideales, como es el caso de muchos hombres y mujeres de EAJ-PNV.

Como recientemente recordaba en Sukarrieta el Presidente del Euzkadi Buru Batzar, Aitor Esteban, “el PNV representa los valores del antifascismo, los del verdadero antifascismo. Aquel que no utiliza sus mismas armas, que no utiliza la violencia, la coacción y el miedo. Así es como se lucha contra el fascismo y el totalitarismo”. Reivindicaba la lucha contra el fascismo y en defensa de la democracia de nuestro partido como un compromiso no retórico sino como la auténtica base ética sobre la que se ha levantado la democracia que disfrutamos en este país.

Como ese día hizo Aitor Esteban, frecuentemente solemos recordar en EAJ-PNV esas palabras de Manuel de Irujo: “los conversos, a la cola”. Al contrario que quienes hoy pretenden darnos lecciones de antifascismo, de moderación, de gradualismo y de posibilismo, EAJ-PNV siempre ha trabajado por la democracia y por desarrollar y fortalecer nuestras propias instituciones y nuestro autogobierno. Y es precisamente esta apuesta por la construcción nacional y social la que nos ha traído a lo que hoy tenemos, a pesar de tener que soportar en nuestras propias carnes las presiones y la estrategia violenta empleada durante años por una izquierda abertzale hoy reconvertida en la vía de la moqueta.

Si algo ha caracterizado a los referentes institucionales de EAJ-PNV ha sido la firmeza en la denuncia contundente de las vulneraciones de los derechos humanos siempre en toda nuestra historia. Tanto las que hemos sufrido en este país desde diferentes lados como las que sufren otros pueblos con los que nos solidarizamos como el pueblo kurdo, el saharaui, el ucraniano o el palestino. Precisamente este mismo mes lo hemos vuelto a hacer con el reconocimiento con la máxima distinción del Parlamento de Navarra, a propuesta de la presidencia, al pueblo palestino a través de su embajador en España como gesto de solidaridad y cercanía por el brutal genocidio que ha sufrido y sigue sufriendo en los últimos tiempos. Una decisión apoyada por la gran mayoría parlamentaria, representativa de la sociedad navarra y que, como expuso el embajador, sitúa a nuestra comunidad en el lado correcto de la Historia.

Estamos orgullosos y orgullosas de nuestro trabajo y compromiso por muchas causas en estos 115 años en Navarra. Y, entre ellas, destaco hoy la de la memoria. Con una contribución decisiva para acabar con el olvido institucional de muchas víctimas de esta tierra durante tanto tiempo hasta la llegada del gobierno liderado por Geroa Bai en 2015. Una política de verdad, justicia y reparación por primera vez desde las instituciones forales para tantas y tantas víctimas olvidadas: del franquismo, de ETA o de la extrema derecha. Teniendo que enfrentarnos en muchas ocasiones a recursos judiciales y todo tipo de trabas impulsadas por el PP, Vox o Ciudadanos que han tratado de impedir que el reconocimiento y reparación de determinadas victimas fuera una realidad.

Y miramos al futuro también con orgullo, porque vamos a trabajar para seguir consolidando y ampliando nuestro proyecto político en esta tierra, como lo llevamos haciendo en los últimos años, para que más personas en Nafarroa se acerquen a trabajar con nosotros y nosotras por causas que merecen la pena: para que las personas jóvenes puedan desarrollarse en todos los ámbitos de su vida: vivienda, educación, empleo, igualdad, medio ambiente o protección del euskara, nuestra lengua. Y vamos a seguir demostrando y reivindicando la buena política de trabajar por el compromiso de mejorar la vida de los demás, por el bien común, combatiendo la lamentable imagen que para la política provocan conductas indignas y amorales de personas que han ostentado cargos públicos y que inundan la atención mediática.

Seguiremos trabajando para conseguir una Navarra y un País libres. Con el orgullo de ser jeltzales y abertzales, de trabajar a favor del euskera, del autogobierno, de la justicia social, de la democracia, de la convivencia y a favor de nuestro pueblo. A favor de Nafarroa. 115 años más…. Por lo menos.

El autor es presidente del Napar Buru Batzar de EAJ-PNV y del Parlamento de Navarra