pamplona - El futuro de Rubén García está destinado a verse de rojo. La cúpula directiva y deportiva del Huesca anunció ayer el acuerdo con el Levante sobre el mediocentro madrileño Gonzalo Melero, que podría provocar que Rubén García, que disfruta de sus vacaciones en Ibiza con la primera plantilla de Osasuna, continúe vistiendo la elástica rojilla el próximo curso.

Osasuna negocia con el Levante para hacerse con los servicios de un jugador que ha manifestado su intención de seguir en Pamplona y por el que suspira tanto la afición como pesos pesados del equipo, que también se han pronunciado públicamente en favor del mediapunta de Xàtiva, a quien la entidad rojilla desea anunciar antes de que finalice el mes, de manera que pueda iniciar la pretemporada al mismo tiempo que sus compañeros, a diferencia de la campaña que acaba de finalizar, puesto que el jugador aterrizó en la capital navarra con el campeonato liguero iniciado.

Mientras que la Cadena SER Valencia se hizo eco ayer de que ambas entidades negocian el traspaso por el jugador por una cantidad inferior a los 3,5 millones de euros que establece su cláusula de rescisión -aunque a partir del 1 de julio se doblará hasta los 7-, la Cadena Cope en la comunidad valencia señaló que “el jugador, además de tener ofertas de otros equipos ajenos a Osasuna y Levante, podría dar el sí definitivo a Osasuna después del fin de semana”, con el que seguiría comprometido hasta junio de 2021, como estipula el contrato que firmó con la entidad navarra en el pasado mercado estival.

Por su parte, el rotativo Superdeporte, que ya recogió el jueves la información de que el cuadro granota estaría interesado en conseguir la cesión del surcoreano Kang-in Lee, ayer añadió que el conjunto de Orriols estaría tanteando al exrojillo Roberto Soldado como sustituto de Rubén García, ya que Borja Mayoral sería una opción inviable.