Jagoba Arrasate se convirtió el pasado viernes por la noche en el protagonista de la entrevista del programa Navarra Hoy, espacio que semanalmente se emite por el segundo canal de Euskal Telebista. Fue una charla distendida sobre uno de los campos de Tajonar en la que el entrenador de Osasuna repasó su trayectoria como técnico del conjunto navarro, habló sobre su familia, sus gustos y sus sueños, y también se despachó con total libertad y sinceridad sobre otros asuntos más trascendentales, aunque relacionados todos ellos con su deporte.
Al ser cuestionado por si considera que el fútbol sigue siendo de los aficionados, el preparador vizcaíno, de 44 años y natural de la localidad de Berriatua, se dejó llevar y respondió con rotundidad: “Cada vez menos”. Pero no se quedó ahí y matizó, refiriéndose a “la supervivencia de Osasuna”, que “dependemos tanto de los derechos televisivos que ahí están los horarios que no nos gustan y hay cosas con las que tenemos que tragar y son así, pero el fútbol es cada vez menos de los aficionados y da pena”.
Arrasate continúo con su explicación haciendo comparaciones con un pasado no tan lejano: “Nos están alejando del aficionado. Antes un periodista llamaba directamente a un jugador y viajaba con nosotros, pero ahora es como que el club hace todo el trabajo y lo manda enlatado. Nos protege demasiado. La mayoría de los equipos hacen los entrenamientos a puerta cerrada, aunque nosotros somos una excepción. Entiendo que es para proteger al futbolista, pero de lo que no nos damos cuenta es de que estamos alejándonos de ese aficionado que al final lo que quiere es estar cerca del jugador, y esa es un poco la esencia y lo que ha sido toda la vida el fútbol. Pedimos muchas cosas a la afición y a veces, en vez de pedir, hay que dar también”.
“Nos están alejando del aficionado. Ahora es como que el club hace todo el trabajo y lo manda enlatado"
Y es que, según Arrasate, que acaba de iniciar su quinta temporada en Pamplona, adonde llegó en el verano de 2018, “aquí la gente es muy de Osasuna, no es de otro equipo, aquí la gente antes del partido toma dos o tres tragos y va al partido. Es como un evento y la gente está esperando que llegue ese momento. Eso es el fútbol de toda la vida”.
Al técnico del conjunto navarro también le preguntaron por una entrevista que Raúl García concedió recientemente al periódico El País, una conversación en la que el futbolista navarro, formado en Tajonar, ex de Osasuna y Atlético de Madrid y ahora en las filas del Athletic, dijo, entre otras muchas cosas, estar “encantado de que me suban los impuestos si ese dinero va a lo que debe”. “Sé cómo piensa y creo que era necesario”, dijo Arrasate, que añadió que, “además, si lo dice Raúl, es como que cobra sentido porque no es un jugador que habla por hablar. Corroboro 100% lo que dijo. Estamos idealizados y creo que no tiene que ser así. Hay gente muchísimo más importante que los futbolistas, pero por desgracia a veces lo que decimos nosotros tiene mucha repercusión y a veces hay futbolistas y entrenadores que no estamos preparados para hablar de algunas cosas y eso puede hacer mucho daño, pero pienso que lo de Raúl vino muy bien”.
También le cuestionaron al entrenador de Osasuna por el Mundial, cuya disputa en invierno por vez primera en la historia va a provocar un inédito parón liguero entre principios de noviembre y finales de diciembre, y por la sede del mismo, Qatar, un país donde no se respetan los derechos humanos y la homosexualidad está penada. “Es un ejemplo de en qué nos hemos convertido”, señaló Arrasate, para explicar de seguido que “paramos la competición un mes y medio cuando hace unos años era inviable o impensable, y además se va a jugar en un país donde no se respetan los derechos humanos”. Sin embargo, según el técnico, “toda la gravedad que tiene eso se va a disipar cuando el balón eche a rodar, porque todo el mundo hablará de la Argentina de Messi, del Brasil de tal y nos vamos a meter en una burbuja en la que al final todo esto de lo que estamos hablando se va a quedar un poco en agua de borrajas”. No obstante, destacó que “eso no quita para darnos cuenta de en qué nos hemos convertido, en ser capaces de parar todas las competiciones del mundo y de que se juegue en un país donde no se respetan cosas tan importantes como los derechos humanos”.
“El Mundial se va a jugar en Qatar, un país donde no se respetan los derechos humanos”
Su opinión sobre los brazaletes arcoíris, símbolo del orgullo gay, que algunas selecciones han anunciado que lucirán en el Mundial, también fue clara: “Poco más puedes hacer porque, aunque parezca mentira, hoy en día no tienes la libertad ni de expresión ni de poder hacer las cosas que quieres, así que esos movimientos me parecen bien porque sí van a tener repercusión y van a ser un foco como para que la gente vea un poco cómo pensamos muchos. Son iniciativas positivas”.
Para terminar, el entrenador de Osasuna señaló que “hay gente más formada que nosotros que no tienen ese altavoz que tenemos los futbolistas y entrenadores por ser famosos, y lo que tenemos que hacer es poner el micrófono a esa gente, gente formada que sabe y que puede llegar a muchos sitios”.
