Budimir empata a 45 goles con Urban y Aimar Oroz hace números

Con el gol de este pasado sábado contra Las Palmas, ya son 45 (en 128 partidos) los que ha anotado Budimir en Liga con la camiseta de Osasuna, todos ellos en Primera, cifra que le permite igualar con Jan Urban (45 tantos en 156 partidos) en el segundo puesto del ranking de mejores goleadores rojillos en la máxima categoría. Al croata y al polaco solo les supera Sabino Andonegui con 57 dianas en 131 partidos. Tanto Osasuna como este periódico contabilizan como gol de Budimir el que el curso pasado se metió Coco, central de Las Palmas, en su propia portería, pero que el árbitro concedió al croata.

Por su parte, Aimar Oroz Huarte (Arazuri, 27/11/2001) marcó este pasado sábado en El Sadar el gol del triunfo de Osasuna contra Las Palmas (2-1). Fue su primer tanto del curso, aunque ya había participado activamente en otros dos: en el definitivo 1-1 contra el Leganés en Pamplona, tanto que se anotó en su propia portería el cancerbero del conjunto pepinero después de un disparo al poste del centrocampista navarro; y en el 2-1 de un partido contra el Celta en casa que terminó con triunfo rojillo (3-2), al provocar que el central Carlos Domínguez desviara a gol un peligroso servicio de Bryan Gil desde la banda izquierda.

Entre los dos goles que no llevaron la firma de Aimar Oroz por muy poco y el que marcó este sábado contra Las Palmas, el canterano firmó la ampliación de su contrato con Osasuna hasta junio de 2028, con una notable subida de sus emolumentos y una más ligera de su cláusula de rescisión, que ahora es de 30 millones de euros, por los 28 de su anterior vínculo.

En la conferencia de prensa para explicar este asunto, se produjo una situación peculiar mientras Aimar, en compañía de Braulio Vázquez, director deportivo del club, respondía a las preguntas de los periodistas en la sala de prensa de El Sadar. “Me puedo sentir mejor un poco más adelante y puedo hacer mejores números”, dijo el futbolista en un momento dado, asunto que un informador retomó más tarde. “¿Mejorar esos números es tu reto inmediato?”, fue la pregunta, teniendo en cuenta que el canterano hizo 3 goles hace dos cursos y 2 el pasado, cuestión a la que el jugador respondió: “Diría que sí, intentar ser más dañino en esos metros finales...”. No siguió hablando porque giró su rostro. “¿Le miras a Braulio por algo?”, le sugirió el periodista. “Porque se ríe”, fue la contestación. “¿Por qué se ríe?”, insistió el reportero. Y el centrocampista de Arazuri, al que se le notó algo incómodo con la situación, zanjó el asunto reiterando que “jugando entre líneas puedo disfrutar más y, si disfruto, puedo hacer mejores partidos y, por lo tanto, mejores números”. Pero como desde el otro lado de la barrera tenían ganas de seguir tensando la cuerda, le volvieron a preguntar por cuestiones referentes a su rendimiento: “¿Sólo los números importan para el desarrollo futbolístico de Aimar o tienes más cosas para aportar?”. Y aprovechó para devolver la pulla a Braulio: “Para algunos parece que solo importan los números, pero intento ayudar en muchas facetas. Me gustaría hacer números también, pero estoy tranquilo”.

Además de en la sala de prensa, Aimar Oroz también está respondiendo en el campo. El mejor ejemplo lo encontramos en el último partido, contra Las Palmas. Después de pasar desapercibido durante la primera hora de juego, el centrocampista de Arazuri aprovechó una sensacional asistencia de Rubén García, tras un robo de Jesús Areso, para marcar el definitivo 2-1. A partir de entonces, tras haberse pegado una buena paliza (rozó los 11 kilómetros, como Moncayola y Torró), disfrutó con el balón, hizo disfrutar a sus compañeros e incluso tiró de galones para revolverse después de una mala patada de Javi Muñoz. No en vano es, con 9, el tercer rojillo que más faltas recibe en Liga, tras Bryan y Torró, ambos con 10. En resumen, que Aimar Oroz hace números.