pamplona. Los arquitectos pamploneses Óscar Pérez Silanes e Ignacio Olite Lumbreras recogieron ayer el premio Architecture students award 2011 por la pasarela de Labrit, una obra que diseñaron junto con Carlos Pereda Iglesias, quien no acudió a la ceremonia de entrega de premios. Entre sus obras más destacadas se hallan el edificio de radioterapia del Hospital de Navarra, o la escuela infantil del colegio Irabia. En la actualidad se encuentran enfrascados en distintos proyectos, como el centro polivalente de los Pirineos, la escuela infantil de la Milagrosa o el Nuevo Museo de Gijón.

¿Cuáles han sido sus sensaciones al recibir este premio?

Óscar Pérez: Ha sido un orgullo. Recibir el premio, que nos lo entreguen arquitectos, y encima que sea en la Universidad de Navarra, donde nosotros hemos estudiado, es un triple orgullo.

Ignacio Olite: Estamos muy contentos y agradecidos.

¿Por qué creen que su obra ha resultado vencedora?

I.O: Como bien ha explicado el jurado, por la rotundidad de la solución y su integración en el entorno. Aunque el material, acero cortén, es de naturaleza dura, los detalles están cuidados.

¿Qué características debe tener una obra pública?

Ó.P: Durabilidad, permanencia. Son obras que no se ejecutan para diez días. Además, requieren por parte de los ciudadanos el esfuerzo de hacerlas suyas. Es una responsabilidad hacer una obra en un punto tan delicado, con tanta presencia, como Labrit.

I.O: La operación de conectar las dos partes del paseo de Ronda es buena en sí misma, y no es mérito nuestro, sino del Ayuntamiento. Se ha hecho pensado en los ciudadanos.

Ó.P: Y en el futuro de la ciudad: que sea accesible, sin barreras.

¿Qué prima más en la pasarela: el diseño o la funcionalidad?

I.O: No creemos en ese maniqueísmo.

Ó.P: Las dos cosas van de la mano al 100%. Es un único elemento.

¿Cómo ha afectado a la arquitectura la crisis económica?

Ó.P: Hay menos concursos.

I.O: Es bueno y necesario que se premie la arquitectura por encima de lo económico. Es fundamental que se haga una buena arquitectura para el ciudadano.

¿Qué opinan de la apreciación que ha hecho el jurado sobre la inestabilidad de la pasarela?

Ó.P: La inestabilidad física no existe. Existe sensación de ligereza. Creemos que el jurado se refería a eso.

I.O: Es absolutamente estable. Se produce cierta vibración que está en la naturaleza del material y que disminuirá conforme aumenten las temperaturas.

Ó.P: Buscábamos que diera sensación de ligereza, que fuera un elemento más sencillo y fino, de tal forma que el que pase por debajo no vea un elemento gordo, pesado... queríamos que fuera casi una línea.