El Ayuntamiento de Pamplona será escenario mañana al mediodía de la sesión plenaria en la que tomarán posesión los 27 representantes elegidos en los comicios del pasado 28-M y de la votación que determinará el nombre de la persona que gobernará la ciudad durante los próximos cuatro años.
Será la decimosegunda corporación del periodo democrático y los interrogantes sobre si será alcalde o alcaldesa se mantienen a pocas horas del momento decisivo.
Habrá una única votación. Si un candidato obtiene la mayoría absoluta, que en el caso de Pamplona son 14 votos, es proclamado alcalde o alcaldesa. Si ningún candidato llega a esa cifra, la Alcaldía se la lleva la lista más votada, que es la de UPN liderada por Cristina Ibarrola.
Aunque en los últimos días se han multiplicado los contactos y las conversaciones entre las formaciones progresistas para buscar una alternativa que impida a la regionalista Ibarrola hacerse con la Alcaldía, no ha habido avances y las posturas se mantienen inalterables.
Los 9 representantes que obtuvo UPN pueden ser suficientes parar darle el gobierno municipal a Ibarrola en la única votación que se celebrará, inmediatamente después de la toma de posesión de los 27 corporativos.
A lo máximo que puede aspirar Ibarrola es llegar a 11 votos con el respaldo de los dos concejales del PP, pero no le bastan para sacar mayoría y depende de lo que puedan hacer las fuerzas progresistas, que en conjunto suman 16.
“Lo intentaremos hasta el último momento” aseguró el candidato de EH Bildu Joseba Asiron, que ha liderado los contactos haciendo valer los 8 representantes conseguidos, el mejor resultado de la izquierda aberztale en Iruña.
Los números de la elección
Asiron se quedó a menos de 3.000 votos a Ibarrola, pero la diferencia que le separa de la Alcaldía se presenta insuperable como consecuencia de la decisión del PSN de no darle sus 5 votos.
En el mejor de los casos, el candidato de EH Bildu obtendría 11 votos: sus 8 votos, los dos de Geroa Bai y el de Contigo-Zurekin.
Los socialistas han sido claros y desde el principio de la campaña electoral dijeron que no iban hacer alcaldesa a la candidata de UPN ni alcalde a Asiron.
La izquierda abertzale habla de veto y las bases no están dispuestas a aceptar la exclusión con el montón de votos obtenidos en las elecciones, pero la realidad es que la postura del PSN descarta a Asiron como alcalde y allana el camino a Ibarrola.
En estos momentos de la negociación, mientras se aceleran los contactos y llamadas, la única opción que puede impedir la Alcaldía de UPN gira en torno a la figura de Koldo Martínez.
Fue una propuesta de los socialistas para evitar el gobierno la derecha y el aval electoral, ya que PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin obtuvieron más votos que la izquierda abertzale (28.732 frente a 27.752).
De paso, echaba toda la presión al tejado de EH Bildu, que si PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin acuerdan votar a Koldo Martínez, se verá en la delicada situación de tener que elegir entre hacer alcalde al candidato de Geroa Bai o dejar que Ibarrola se lleve la Alcaldía como candidata de la lista más votada.
La izquierda abertzale no ha querido ni hablar de esta tercera vía y ha intentado desactivarla por todos los medios, pero a menos de 24 horas de la sesión de investidura es la única con posibilidades reales de impedir el gobierno de UPN.
La fórmula pasaría por un equipo de Gobierno formado por EH Bildu, que ocuparía la mayoría de las áreas municipales, Geroa Bai y Contigo-Zurekin, con el apoyo externo del PSN.
