Más de tres semanas después de la celebración de las elecciones municipales, dos de las formaciones que obtuvieron representación en el Ayuntamiento de Pamplona no disponen todavía de un espacio para desarrollar sus funciones.
Los dos concejales del PP, Carlos García Adanero y Carmen Alba, y el de Contigo-Zurekin, Txema Mauleón, no cuentan aún con una sala o despacho de trabajo ni tampoco han sido informados de las previsiones que maneja el Consistorio para dotarles de un espacio.
Los tres tomaron posesión de sus cargos el pasado sábado, pero desde el 28 de junio era sabido que la nueva corporación pamplonesa iba a tener 6 grupos municipales, frente a los 4 de la pasada, lo que iba a obligar a realizar algún tipo de retoque o habilitar espacios adicionales para acoger a las dos nuevas formaciones políticas.
El reglamento interno es claro al respecto. El artículo 31 establece en el punto 1 que “el Ayuntamiento pondrá a disposición de los grupos políticos los locales y medios personales y materiales para el adecuado cumplimiento de sus funciones”.
En el punto 2 del mismo artículo se especifica que “cada grupo político, así como el grupo mixto, tendrá asignada una sede u oficina independiente, en proporción a su número de concejales, para reuniones y recepciones”.
De momento no hay ninguna decisión, sin descartar la posibilidad de que se puedan reordenar los espacios que los grupos municipales ocupan actualmente en la tercera planta del edificio consistorial, junto a la sala de prensa.
UPN y EH Bildu cuentan con los despachos más amplios al tratarse de las fuerzas que obtuvieron mayor representación hace 4 años, pero la situación es diferente tras los comicios del 28-M.
En el caso de los primeros han bajado su representación (como Navarra Suma obtuvieron 13, frente a los 9 de ahora), mientras que la izquierda abertzale ha subido de 7 a 8 concejales. PSN y Geroa Bai mantienen la misma representación que en el pasado mandato, con 5 y 2 ediles respectivamente.
El viernes se reúne la Junta de Portavoces
Es previsible que el asunto salga a relucir en la Junta de Portavoces que se celebrará este viernes.
Será la primera reunión formal de los 6 grupos municipales tras los contactos que ha mantenido la alcaldesa Ibarrola esta semana con los portavoces, con la excepción de EH Bildu y PSN (a los primeros no ha llamado y los segundos rechazaron la invitación).
La tarea prioritaria de la nueva alcaldesa es organizar la nueva estructura interna con la que piensa gobernar en solitario el Ayuntamiento.
La previsión es que esté finalizada antes del 4 de julio, fecha en la que se celebrará el primer pleno de la legislatura.
