Una residencia de artistas en Casa Arraiza, el centro de la agricultura ecológica en Casa Soto, pero también recuperar de la ruina el convento de las Agustinas de Aranzadi... El Ayuntamiento se ha propuesto reimpulsar la actividad en el Parque de Aranzadi después de años de abandono, durante los cuales esta zona se ha convertido en un espacio residual.
Así lo señaló este lunes el concejal delegado de Gobierno Estratégico, Urbanismo y Vivienda, Joxe Abaurrea, en la rueda de prensa donde se dio a conocer la licitación de la nueva gestión de Casa Gurbindo y sus huertas adyacentes, tras la renuncia de Fundación Fundagro y 15 años de concesión administrativa. “El año pasado nos comunicaron que su tiempo se estaba agotando, y en nuestra opinión, esto tuvo que ver con el abandono del parque”, dejando claro que Casa Gurbindo no podía tirar por sí solo. Y durante estos meses han continuado la actividad para que el Consistorio licitara el proyecto: “Se lo agradecemos”, por “la colaboración en esa transición”. Porque un espacio de estos cerrado habría sido muy difícil de reactivar.
La nueva concesión será por 25 años (antes se adjudicó por 75), prorrogable por un periodo adicional máximo de otros 10 años. Las parcelas objeto de la concesión deberán ser destinadas a actividades que giren en torno a la agricultura como actividad que debe desarrollarse de manera sostenible. Se podrá realizar producción sostenible de alimentos en las huertas para autoconsumo o venta; educación medioambiental a escolares a través de visitas; exposición de los productos y las diferentes denominaciones geográficas protegidas y de origen de Navarra; actividades de taller-cocina para fomento de la gastronomía sostenible, formación, comedor de personal y elaboración de productos para catering; centro ocupacional para personas discapacitadas o en riesgo de exclusión; o cesión de espacios u organización de eventos ligados a la actividad de la concesión.
Lo más importante es “que haya actividad” en Casa Gurbindo, avanzó el concejal, quien incidió en que por ello el concurso valora con hasta 60 puntos el proyecto, más allá de la propuesta económica.
SE BUSCA ACTIVIDAD “QUE GENERE ILUSIÓN”
Porque, según añadió, Aranzadi ha sufrido una gran dejación durante los años anteriores, y el nuevo Equipo de Gobierno lleva “un tiempo intentándole dar un impulso, con una programación que vuelva a dar ilusión y que coloque a Aranzadi en lo más alto de la actividad del Ayuntamiento”. Piensa el Ayuntamiento en poner en valor la riqueza de esta zona, dado que Aranzadi es, según añadió, “algo más que un parque al uso. Es un espacio hortícola ligado a la inclusión social y a la economía circular” y, por ello, “estamos impulsando actividades en todos los ámbitos”.
Así, citó, junto con Casa Gurbindo, Casa Arraiza, donde irá una residencia de artistas; y Casa Soto, con su proyecto de invernaderos y un centro de la agricultura ecológica.
A estos se añadirá, o en eso confía el Ayuntamiento, el antiguo convento de las Agustinas de Aranzadi. La semana pasada concluía el plazo de presentación de proyectos (se apostaba por un uso comunitario o sociosanitario) y, según avanzó el concejal de Urbanismo, “tenemos algunos ya y hay cierta expectativa”. En breve, “conoceremos su valoración” (se han presentado dos), porque “queremos empezar una nueva etapa para Agustinas”. Y lo más importante: “La parte central del proyecto es la recuperación del edificio”, con una intervención de 10 millones de euros.