Laba Elkartea, que comenzó a andar en 2022 con su proyecto con el euskera y la cultura euskaldun como eje vertebrador, amplía su espacio en el centro de Pamplona tres años después. El colectivo, integrado ya por cerca de 200 personas, refuerza su presencia en la Plaza del Castillo con el local anexo del antiguo bar Windsor, que cerró en el verano del año pasado.

Como ya avanzó este periódico, Laba crece y en unas semanas arrancan las obras que conectarán ambos espacios. Pero antes, el próximo sábado, 22 de febrero, habrá celebración para decir agur al viejo Laba y hasta pronto al que vendrá, totalmente renovado, "para el próximo curso", prevén.

Según anuncian "no será una fiesta de despedida. No diremos agur! en esta fiesta. Diremos gero arte!, hasta luego! Gero arte al local que ha utilizado Laba durante tres años, ya que permanecerá cerrado a partir del 22 para que comience la obra de ampliación del local. La cafetería de Laba será más grande el próximo curso, ya que el bar de al lado y el local actual los conectarán en estos meses", indican.

Gracias a ello "Laba tendrá un espacio más amplio para ofrecer actos culturales y podrá hacer una oferta en mejores condiciones". Detallan que "se trata de una obra grande y compleja, ya que se trata de unir las dos salas y transformar de arriba abajo la actual cafetería y sala cultural de Laba", por lo que "el espacio permanecerá cerrado durante varios meses".

Tras las obras, "Laba dispondrá de una sala más preparada, con posibilidad de ampliar su oferta. De hecho, se ampliará el escenario, se mejorará el equipo de música y la sala renovará su aspecto". De momento, indican que "no podemos dar una fecha exacta de apertura, pero esperamos abrir las puertas, como tarde, al inicio del próximo curso".

Aunque el Local de la Plaza del Castillo estará cerrado estos meses, "en cualquier caso, la actividad del proyecto no dirá adiós; seguirá en marcha". Porque, según precisan, "Laba no es un local ni una cafetería, es una red de personas con un proyecto que va más allá de un espacio físico". Por ello, "la programación habitual de Laba se realizará en otros lugares: en los locales de varias asociaciones y proyectos amigos de alrededor, que nos han abierto la puerta de par en par. ¡Gracias a todas ellas!", apuntan.

"Cambiará el espacio, pero no el proyecto"

En el comunicado Laba Elkartea detalla que "desde sus inicios, Laba ha soñado con un proyecto ambicioso para la comunidad euskaldun de Iruñea, y en ese camino ha intentado aprovechar las oportunidades que se le han brindado".

Recuerdan que "primero tuvimos la oportunidad de utilizar una sala en la Plaza del Castillo, donde hemos desarrollado el proyecto y la oferta cultural durante tres años". En este camino "hemos creado ciclos muy variados y nuestra obsesión ha sido abordar temas que no suelen ofrecerse en euskera, hablar en euskera en aquellos ámbitos en los que el euskera suele tener menos sitio. Hemos intentado dar cabida a expresiones artísticas diversas (teatro, artes plásticas, música, danza, literatura…) y muchos creadores y colectivos han tenido un espacio para mostrar y presentar sus proyectos. Laba también ha abierto sus puertas a diferentes luchas, siempre en euskera, trabajando y visibilizando la interseccionalidad de éstas".

Espacio de terraza de Laba, que ahora se podrá ampliar con la de Windsor. Iban Aguinaga

Pero también y ese es otro de sus objetivos, "hemos intentado acercar el euskera a quienes pudieran verlo lejano, dándoles un sitio acogedor y seguro para poder conocernos mutuamente. En adelante seguirá siendo así, por supuesto".

Fiesta el 22 de febrero

12:00. Mercadillo, cápsula del tiempo y vermú amenizado por DJ Barbarie en Laba.

13:00 Tribialaba!

14:30 Comida en el bar Mantón.

18:00 Acto central eta baile de swing en Laban.

19:00 Karaokea

Para el colectivo "ahora ha surgido una segunda oportunidad, ya que la sala que utiliza Laba se conectará con el bar contiguo. Por lo tanto, habrá un bar dentro de la sala y un espacio más amplio para la celebración de eventos culturales. Podremos seguir con el mismo proyecto pero con mejores recursos y una infraestructura mejorada".

En cuanto al servicio hostelero, "se mantendrá el servicio de cafetería, sí, pero se le sumará el servicio de bar. Mientras la sala permanezca cerrada, además de continuar con nuestra actividad habitual, estaremos reinventando y repensando el proyecto Laba. Estamos llenas de ilusión, con ganas de ver crecer el proyecto y con la esperanza de poder acercarnos un paso más a la Laba que soñamos al principio. En este camino será imprescindible, como hasta ahora, el trabajo y la aportación de las voluntarias y socias".