PAMPLONA. "Declaramos nuestro compromiso por la no violencia y nos esforzamos por una cultura de paz y cooperación entre los estados, dentro de las sociedades y entre los individuos, como la base de la seguridad global", dice Verdes de Navarra en un comunicado en el que recuerda que estos principios están recogidos en la Carta Verde de la Tierra, "guía política e ideológica básica asumida por el conjunto de los partidos verdes en todo el mundo".
Sin embargo el Supremo ha anulado la candidatura de la agrupación electoral Oskotseta, la única presentada en el concejo navarro de Urritza (40 habitantes) y compuesta únicamente por Antonia Echarri Aldaz.
Echarri es miembro de Verdes de Navarra-Nafarroako Berdeak desde hace años, fue elegida presidenta del concejo en 2007 con el apoyo del 66 % de los electores y ahora figura también en la lista de los verdes al Parlamento Foral en el puesto 23, pero el Supremo indica de ella que "presenta vinculación directa con partidos ilegalizados", y por tanto su candidatura puede ser un intento de fraude para continuar la actividad del entramado ETA-Batasuna.
"Conocemos y compartimos su trayectoria política en los últimos años y podemos dar fe de que el partido Verdes de Navarra- Nafarroako Berdeak nunca ha estado ilegalizado", subraya esta formación política en defensa de Echarri y de su propia marca.
Y añade que "más allá de toda lectura partidista, desde Verdes de Navarra-Nafarroako Berdeak queremos expresar la dudosa calidad ética y política que nos reflejan todas las actuaciones políticas y resoluciones judiciales que niegan el derecho a participar en las elecciones a ciudadanos y ciudadanas en pleno goce de sus derechos".