pamplona - Por segunda vez en dos meses y en una nueva escalada de tensión, Ciudadanos no ha logrado el respaldo del Congreso para que el Gobierno de Pedro Sánchez active la maquinaria del artículo 155 en Catalunya, que empezaría con un requerimiento al presidente catalán, Quim Torra, a cumplir sus obligaciones legales. Los socialistas votaron en contra con Unidos Podemos, los partidos independentistas catalanes -ERC y PDeCAT-, PNV, Compromís y Bildu, mientras que PP, UPN y Foro apoyaron también la moción, y CC se abstuvo.
Hace dos meses hubo una votación similar, y la mayoría de la Cámara Baja ya tumbó sendas mociones de PP y Cs para poner en marcha el 155 tras las protestas violentas de los autodenominados Comitès de Defensa de la República (CDR) el 1 de octubre y el apoyo que Torra les brindó.
Rivera advirtió a los socialistas que, si aprietan el botón rojo, “romperán todos los puentes posibles” con Cs y los españoles se lo harán pagar en las urnas, como han hecho en Andalucía, porque el mensaje que trasladarán a los españoles será “letal”, que les importa más “el sillón de Sánchez que defender la Constitución”. Rectificar y dejar de tener de aliados a los separatistas abriría, en opinión de Rivera, un nuevo camino, el del consenso y “el retorno al constitucionalismo”.
El Gobierno, recalcó, tiene la “obligación política y moral de defender la integridad” de todos los que viven en Catalunya y advirtió de que, si ocurre alguna “desgracia” el viernes, cuando se reúne en Barcelona el Consejo de Ministros, el Ejecutivo de Sánchez será también responsable y cómplice.
ultraderecha El PSOE arremetió contra Cs por plantear la petición del 155 sin que haya “hechos jurídicos que lo justifiquen” y solo para “atizar el conflicto y obtener ventajas electorales”. “Son unos pirómanos. Quieren el poder quemando la convivencia de España. No hacen más que echar gasolina al conflicto. Son unos irresponsables. Practican la política de tierra quemada. Ni una sola solución”, reprochó con dureza el diputado del PSC José Zaragoza.
A su juicio, lo que busca Cs es “devolver el poder al PP con su pacto con Vox” en Andalucía y el 155 es “la manta para esconder sus acuerdos oscuros y vergonzantes con la ultraderecha”. El diputado subrayó que desde que gobierna Sánchez se ha aplicado “toda la firmeza de la ley y la fuerza del diálogo”.
Por parte del PP, su diputado Jordi Roca Mas consideró que “el clima antidemocrático” impuesto por la Generalitat justifica la activación del 155 para “normalizar Catalunya y devolver la democracia plena”. Roca Mas sostuvo que Torra “no puede seguir ni un minuto más” al frente del Govern después de amenazar con un conflicto bélico al apostar por la vía eslovena.
Los partidos independentistas catalanes calificaron de “pantomima” la moción de Ciudadanos, al que también reprocharon su disposición a pactar con el partido de ultraderecha que dirige Santiago Abascal, según el diputado del PDeCAT Jordi Xuclá. “Parece que desea que haya conflictos”, reconvino Xuclá a Rivera, al que afeó su “matonismo parlamentario” por exigir al PSOE que active el 155.
Desde ERC, Jordi Salvador reprochó a Cs y PP que no acepten que Catalunya sea una nación y que vean la crisis catalana como un problema legal y no político. Salvador dio a ambos un consejo: “Fíjense más en (Adolfo) Suárez que en Abascal, que tuvo agallas suficientes, que ustedes no tienen, para restablecer la Generalitat con (Josep) Tarradellas” y recuperar así la única institución republicana de facto.
Tanto PNV como En Comú Podem coincidieron en que no hay motivos que justifiquen la aplicación de “un 155 inconstitucional” y que supondría “suspender la autonomía” de Catalunya. - D.N.