El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, tiene previsto descolgar el teléfono y mantener un contacto a partir de septiembre con el presidente del PNV, Andoni Ortuzar. Sonará en Sabin Etxea, pese a que los populares siguen creyendo que los jeltzales se equivocaron gravemente cuando en 2018, hace ya cuatro años, activaron el botón rojo para dejar caer a Mariano Rajoy. Aprovechado su hueco por el superviviente Pedro Sánchez, presidente español que ha tenido que sortear no pocas dificultades en estos últimos años, el Partido Popular confía en ir restituyendo los puentes rotos con el PNV. Todo indica que Génova busca despegarse del aislamiento en el que parece haberse sumido de la mano de Vox.

“El Partido Nacionalista Vasco se equivocó profundamente en la moción de censura y el PNV lo sabe”, manifestó ayer Feijóo en una entrevista concedida a Europa Press en Santiago de Compostela, coincidiendo con el arranque del curso político. Pero las heridas dejadas por la afrenta que los populares dicen haber sufrido –Rajoy fue objeto de la primera moción de censura en prosperar en la transición española–, el dirigente admite haber mantenido una relación “cordial” con el PNV durante su mandato al frente de la Xunta de Galicia, especialmente con el lehendakari Iñigo Urkullu. Las reacciones ante las medidas ideadas por Sánchez durante la pandemia unieron a Ejecutivo vasco y gallego, amén de cuestiones pesqueras. En todo caso, son muchas las diferencias que alejan a PNV y PP, aunque también existen convergencias. “Discrepamos del modelo de Estado del PNV y discrepamos de su planteamiento nacionalista”, abundó Feijóo, que por el contrario admitió que coinciden “en muchas políticas económicas, en muchas políticas industriales, en muchas políticas de bienestar social”, resumió.

Al ser preguntado si intentará forjar una mejor relación con los nacionalistas vascos –después de que el líder caído del PP Pablo Casado atizara de lo lindo a los jeltzales–, con la vista puesta en un hipotético apoyo a su partido desde Sabin Etxea para las generales del próximo año, Feijóo hizo hincapié nuevamente en que el PNV “se equivocó“ en la moción de censura, pero el presidente del PP abre una posibilidad al acuerdos y se mostró abierto al diálogo con los máximos representantes de la formación encabezada por Andoni Ortuzar.

Feijóo aseguró también haber mantenido una buena relación “durante muchos años” con el lehendakari, Iñigo Urkullu. De hecho, puso especial énfasis en señalar algunas de las coincidencias que han unido ambas trayectorias políticas, como son las últimas elecciones autonómicas en las que ambas regiones han coincidido en fechas. “Hemos hecho las elecciones juntos en el año 2012, en 2016 y en 2020. Y en el 2020 había pandemia. Por tanto, uno conoce al PNV y sabe que hay cosas en las que coincidimos y cosas en las que no”, afirmó.

Sánchez, “insoportable”

El líder del primer partido de la oposición sí que confirmó que mantendrá un contacto con Ortuzar a la vuelta del curso político. “¿Qué va a ocurrir con el PNV? Hablaremos con él. Hemos quedado en hablar a partir de septiembre”, zanjó, bajo el pensamiento del dirigente del PP de que si “cinco años de Pedro Sánchez en La Moncloa es muchísimo tiempo; diez años, toda una década, creo que España no lo soporta”.