A las doce de la noche del domingo ya se podía prever: ojo con el voto exterior. Con una votación tan apretada entre dos bloques –Sánchez, 172 escaños; Feijóo, 171; Junts, 7–, cualquier escaño arriba-abajo puede cambiar todo el panorama.

Y eso es precisamente lo que puede ocurrir mañana, cuando se cuente definitivamente el voto del Censo de Residentes Ausentes en el Extranjero (CERA). Hay varias provincias en liza. Pero todos los ojos están puestos en una: Madrid.

Allí el PP se quedó a punto de sacar 16 escaños la misma noche electoral, pero finalmente fueron 15 y quedó en manos del PSOE, por muy poco. Ahora el voto de quienes viven en el extranjero –muy numeroso en esa provincia– puede devolvérselo a Feijóo. Es clave: porque el PP se lo anotaría a costa del PSOE. Así que la fuerza de los bloques se invertiría: 172 para Feijóo; 171 para Sánchez. Se pueden mover otros escaños en otras circunscripciones. Pero el de Madrid es el que más cerca está de cambiar de manos.

Ya es casualidad, pero ese escaño es precisamente el de un navarro: el de Carlos García Adanero. El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Pamplona y exmiembro mítico de UPN coprotagonizó el mayor cisma de la derecha navarra después de no hacer caso a las directrices de Javier Esparza en la votación sobre la reforma laboral de febrero de 2022.

Nunca ha ocultado que su deseo era seguir en el Congreso, así que además de encabezar la lista al Ayuntamiento, el PP también le hizo hueco en Madrid. No en un puesto de salida –como el de Sayas por Navarra–, pero sí en uno con posibilidades de tener acta. Las encuestas, de hecho, decían que el PP metía 17 en esa plaza. Pero no fue la mejor noche para las encuestas.

Las cuentas del PP

Los cálculos son los siguientes, según el PP: el escaño de Adanero está a 1700 votos. De entrada, es un trecho corto. Luego hay varios factores que reafirman la posibilidad.

La primera, que el PP ganó las elecciones en Madrid con mucha claridad: 40,5% del voto frente a menos del 28% del PSOE. El usuario @em_martinez7 lo explicaba en Twitter. Para las autonómicas del 28-M, Madrid contabilizó unos 28.000 votos del exterior. Ahora pueden ser más teniendo en cuenta que la participación fue mayor. Si el voto exterior sigue la tendencia del domingo, el PP podría anotarse 4.000 votos, más que suficiente para el escaño 16.

Se sabrá a partir de mañana, cuando se empezará a contar el voto CERA, que es el que cierra definitivamente el resultado de las generales. Las Juntas Electorales Provinciales son las encargadas de concluir el escrutinio general con los potenciales 2,3 millones de votos que se pueden cursar desde el extranjero.

El PP tiene el ojo echado a otros, pero son más remotos. Y, en algún caso, intrascendentes, porque cambiarán de manos dentro de los bloques. En Cantabria, los populares están a 428 votos de arrebatar el escaño de Vox. Y, por último, los populares dependen de 363 votos para quitar un escaño a Junts per Cataluña en Girona, donde el PP no tiene actualmente ningún representante y los electores con derecho a voto en el extranjero alcanzan los 23.993. Es más complicado, porque el histórico de CERA en Girona no juega a favor del PP y sí de Junts.