La derecha ha terminado cayendo en lo que tanto había criticado. En febrero de este mismo año, durante el último debate presupuestario, UPN, PP y Vox reprocharon al Gobierno de Navarra haber “abusado” de las enmiendas nominativas, las subvenciones directas –generalmente de poca cuantía y con fines sociales, para ONG o colectivos– que quedan añadidas al Presupuesto definitivo tras el debate de enmiendas parciales que arranca el lunes.

Sin embargo, los mismos grupos de derechas que tildaron estas partidas de “ayudas a dedo” han presentado esta vez casi 100 millones en enmiendas nominativas, más de seis veces la cantidad que han pactado los socios del Gobierno, que se queda en un estrecho margen de 15 millones, justo para hacer ajustes de última hora.

Las enmiendas nominativas formuladas por la derecha para el próximo debate presupuestario. Diario de Noticias

No obstante, UPN, PP y Vox apenas tienen posibilidades de ver aprobada ni siquiera una de estas enmiendas, a no ser que sea por despiste o tras un acuerdo más amplio alcanzado in voce con el resto de grupos, cosa poco habitual. El Presupuesto está medido al milímetro, tiene muchas partidas comprometidas y no puede alterar sustancialmente las cifras que ya ha presentado la consejería de Hacienda, que ha dejado en 5.974,8 millones de euros el umbral máximo de gasto. Sobre esta cantidad, que es 139 millones superior a la del año pasado, hay muy poco margen de maniobra.

La misma estrategia que en 2023

El de las enmiendas nominativas no es un debate nuevo. Siempre ha estado latente cuando toca negociar los Presupuestos. Lo que pasa es que hace un año la Cámara de Comptos emitió un informe en el que criticaba la fórmula. No porque sea una ilegalidad flagrante, sino porque es una fórmula de la que no conviene abusar en la medida en la que puede perjudiar la concurrencia pública.

La derecha cogió ese informe como un ariete contra el Gobierno, sin reparar en que la presentación de grandes sumas mediante enmiendas parciales es una táctica habitual, sobre todo utilizada por ellos mismos, que para los actuales Presupuestos llegaron a proponer 500 millones en enmiendas con cargo a una partida de solo 32 millones.