Quitarse los zapatos antes de entrar en una casa es "un acto simbólico de cruzar la frontera entre lo público y lo privado", describe la experta en comunicación intercultural Lucyna Aleksandrowicz-Pędich.
"Los zapatos incluyen microbios que se depositan en el suelo"
Según un estudio publicado en 2015 por la revista médica 'Microbiome', "los zapatos incluyen microbios que se depositan en el suelo". Una afirmación respaldad por cada vez mas expertos. La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) ha afirmado que quitarse los zapatos al entrar a la casa es una buena práctica de higiene general. Se trata así de una tradición milenaria arraigada en diversas culturas alrededor del mundo.
Quitarse los zapatos antes de entrar en casa, ¿sí o no? Esto es lo que dice un doctor
Con más de dos millones de visualizaciones y más de 63.000 me gustas, la publicación de Manuel Viso, médico especialista en Hematología y Urgencias, no ha dejado a nadie indiferente. En ella, el especialista habla de las ventajas de quitarse los zapatos antes de entrar en casa.
"Te da un plus de salud y de calidad de vida. Los zapatos que vienen de la calle acumulan una ingente cantidad de gérmenes, bacterias, virus, hongos... que eso lo vas a dejar en las alfombras de tu casa, lo vas a dejar en el suelo de tu casa... ¿Y si tienes un niño que gatea o si tú mismo gateas y apoyas las manos y luego esas manos van al queso, al jamón, al chorizo o al pan y te lo comes? Un estudio de la Universidad de Houston dice que el 99% de los zapatos acumulan restos fecales, es decir, caca. Y un estudio de la Universidad de Arizona dice que en la superficie externa de los zapatos se acumulan más de 450.000 unidades de bacterias y en la superficie interna, es decir, donde va el pie, se acumulan más de 3.000 unidades de bacterias, que eso se va acumulando cada vez que vamos utilizando el zapato. Esas bacterias, además, si hay caca, entenderéis que se van a alimentar de todos esos restos que van acumulando los zapatos aparte de toda la cantidad de gérmenes que hay ahí. Además, quitarse los zapatos la llegar a casa es una forma de decirle a tu cerebro que cambiamos de ambiente, relájate, estamos en el ambiente de nuestra casa, ya dejamos el trabajo atrás. Incluso andar descalzos un ratito ayuda a mejorar el confort de los pies, mejorar la flexibilidad, mejorar los músculos, mejorar la coordinación, y, sobre todo, en nuestros peques", explica de manera detallada el experto.