Los expertos de la Clínica Universidad de Navarra (CUN) explican que "existen dos fracciones dentro del colesterol, el conocido como HDL, que lleva el exceso de colesterol de los tejidos hasta el hígado, y el LDL que lo transporta al interior de las arterias. Unos niveles elevados de colesterol total, es decir más de 200 mg/dL, favorecen el depósito del colesterol en las arterias y originan la aterosclerosis, que consiste en el endurecimiento y disminución del calibre interior de estas".
El riesgo de cuando los niveles de colesterol en sangre son elevados
En esa misma línea, añaden que "así, cuando los niveles de colesterol en sangre son elevados, tiende a depositarse en los grupos arteriales que riegan el corazón, el cerebro, los riñones y las piernas. Al ir estrechándose poco a poco las arterias, llega un momento en el que la sangre que reciben ciertos órganos es insuficiente, por lo que la persona puede sufrir un ictus, demencia, hipertensión arterial, insuficiencia renal o un infarto de miocardio".
Para mantener los niveles de colesterol "a raya" los especialistas de la CUN hablan de tres claves: alimentación, ejercicio físico y peso adecuado. Sobre estos aspectos detallan lo siguiente: "La dieta mediterránea es buenísima; abundante fruta, vegetales, pescado, aceite de oliva y frutos secos. Sin embargo, hay que eliminar de nuestra dieta las carnes rojas, la bollería industrial, los derivados lácteos y los embutidos. Ejercicio físico: para reducir los niveles de colesterol en la sangre es necesario hacer deporte durante una hora al día. Peso adecuado: es importante comer una cantidad limitada, es decir, no saciarse (levantarse de la mesa con hambre). Una misma persona si aumenta su peso, tendrá más colesterol en su organismo, mientras que si adelgaza, se reducirán los niveles en la sangre".
¿Cuáles son los mejores quesos para evitar el colesterol alto? El doctor Manuel Vito tiene la respuesta
En la línea con lo que venimos comentando, los expertos de la CUN afirman que "hay que eliminar de nuestra dieta las carnes rojas, la bollería industrial, los derivados lácteos y los embutidos". Uno de los alimentos de los que más puede llegar a costar desprenderse es del queso. Sobre él ha hablado el doctor Manuel Vito, con nombre de usuario @manuelvisothedoc y que cuenta con más de 80.000 seguidores en Instagram.
"No todos los quesos son iguales. Los quesos frescos como el ricotta, el queso cottage y la mozzarella baja en grasa son opciones más saludables para el corazón que los quesos curados o maduros. Algunos estudios sugieren que el consumo moderado de ciertos quesos, como el gouda o el brie, podría no elevar tanto el colesterol LDL ('malo') debido a su contenido de calcio y compuestos bioactivos. El alto contenido de proteínas y grasas saludables puede hacer que el queso sea saciante, ayudando a reducir el hambre y a evitar comer en exceso. Algunos quesos tienen tanto sodio como una bolsa de patatas fritas, mientras que otros, como el queso fresco o el mozzarella, son opciones mucho más bajas en sal. El ácido linoleico conjugado (CLA), presente en los quesos de leche de vacas alimentadas con pasto, se ha relacionado con beneficios para la salud cardiovascular. Moderación y elección inteligente son la clave para disfrutar del queso sin perjudicar la salud cardiovascular", explica de manera detallada el doctor.