Llevan juntas 25 años, con una estructura que les ha permitido adaptarse a unas circunstancias que no siempre han sido sencillas y han sabido evolucionar lo suficiente para seguir siendo lo que fueron desde el principio, un grupo de pamploneses de toda clase y condición, más o menos numeroso, unidos por su pasión incondicional hacia las fiestas de San Fermín.
El trabajo en común arrancó mucho antes, desde que los integrantes de las peñas de Pamplona entendieron que debían trabajar de forma coordinada en los asuntos de su incumbencia y dar voz a los miles de pamploneses que en algún momento han formado parte de ellas.
Puede que ahí se esconda su secreto y su fortaleza, porque siempre han estado ahí y son parte de esta ciudad, cualidades que les han permitido mantenerse juntas después de tanto tiempo pese a las divergencias internas y los ataques externos.
Aunque algunos hayan intentado proyectar una imagen de uniformidad, la realidad es que las peñas no son iguales ni lo han sido nunca. Cada una de ellas tiene una identidad propia y sus prioridades; cada una está compuesta por personas de una ideología, de otra o de ninguna; pueden tirar más a un lado que al otro, pero el lazo que las une entorno a los Sanfermines ha demostrado ser más resistente de lo que algunos hubieran deseado.
Dieciséis sociedades integran en la actualidad la Federación de Peñas de Pamplona-Iruñeko Peñen Federazioa, la entidad creada en la primavera de 1998 tras aprobarse la nueva legislación sobre sociedades, dando continuidad al trabajo realizado por la Comisión de Peñas, el organismo que hasta entonces se había encargado de su representación e interlocución.
Varias de las personas que han estado al frente de las peñas a lo largo de estos años se reunieron la semana pasada en los locales del Bullicio para comentar sus experiencias y sus reflexiones sobre la evolución que han tenido y lo que está por venir.
Estuvieron presentes Iosu Santxez, actual presidente de la Federación, Endika Lacuey (que fue presidente entre 2003 y 2015), Mikel Donlo (de 2015 a 2017) y Txaro Pardo, la primera mujer en presidir una peña y portavoz de la Comisión de Peñas durante diez años.
No pudieron acudir por motivos ajenos a su voluntad Jon Garbayo, que fue el primer presidente (1998-2002), Javier Itoiz, que estuvo al frente de la Federación hasta 2003; e Imanol Azkona (2017-2020).
Charla en el bullicio
La conversación fue fluida desde el principio, recordando los episodios vividos por cada uno y analizando la evolución de las peñas, que como ha sucedido con la ciudad y sus habitantes, han cambiado mucho durante estos años.
Todos coinciden en destacar la importancia del trabajo de la Federación como espacio de participación y de avances sociales, como la integración de la mujer en la fiesta, el compromiso por la igualdad, la lucha contra las agresiones sexistas o la introducción de medidas sostenibles como el vaso de plástico.
“La Federación no opina sobre los festejos taurinos, es un asunto de cada peña”
Cada peña, independientemente del número de socios, cuenta con un representante en la Federación, donde se coordinan las actividades culturales, deportivas o lúdicas que organizan a lo largo del año, y de interlocución oficial en foros como la Mesa de los Sanfermines.
“Antes de la Comisión de Peñas ya existía una relación entre ellas. Ha habido momentos de tensiones, como en el 78, en 2010 cuando dos peñas fueron denunciadas ante la Audiencia Nacional o tras el asesinato de Miguel Ángel Blanco, pero han sabido mantenerse unidas” comentó Endika Lacuey.
“Al principio fue la fiesta el nexo de unión y luego se fueron incorporando aspectos culturales y sociales, pero la problemática y el día a día de las sociedades es la misma. Cada peña tiene sus sensibilidades y cada una refleja la diversidad que existe en nuestra sociedad” señaló Txaro Pardo.
“Algún día se sabrá todo lo que han hecho las peñas; nos ha tocado emplearnos a fondo”
Mikel Donlo, por su parte, indicó que “ha habido momentos de tensiones internas, cuando una peña ha intentado hacer prevalecer sus intereses sobre el interés común de la Federación. Dentro del consenso que hemos intentado llevar como presidentes creo que lo hemos sabido llevar bastante bien”.
Iosu Santxez explicó el episodio ocurrido hace tres años con la pancarta de la peña Armonía Txantreana, que provocó una tensa polémica interna y externa por contener mensajes de apoyo a un preso de ETA: “Lo que hicimos primero fue sentar a la Federación de Peñas para conocer la opinión de todos y luego hablamos con las peñas implicadas. Fue una mañana de diálogo y creemos que salimos fortalecidos del proceso. Dentro de la diversidad hemos sabido encajar el engranaje. Trabajamos por un objetivo común”.
Diversidad
La histórica portavoz de la Comisión de Peñas comentó al respecto que “la diversidad de la sociedad pamplonesa está reflejada en cada peña. Somos el espejo de lo que pasa en nuestra ciudad. Las peñas no estamos para tocar temas políticos, ese no es nuestro papel, pero tampoco podemos ponernos de espalda a la realidad que en cada época nos ha tocado vivir. En ocasiones nos hemos tenido que emplear a fondo. Algún día se sabrá todo lo que hemos hecho las peñas, hay cosas que se saben y otras que no se conocen, y pienso que hemos dado mucho más de lo que hemos recibido”.
“Ha habido momentos de tensión, pero han sabido mantenerse unidas”
El actual presidente hizo alusión al Plan Estratégico 2023-2027, donde se plantean escenarios de futuro y líneas de actuación, y a la diagnóstico interno elaborado con las aportaciones realizadas por 1.170 personas socias de las 16 peñas, a través de reuniones, entrevistas grupales, encuestas y un taller de contraste.
Lacuey considera que las peñas conforman el colectivo social más importante de Pamplona, con 5.173 personas socias, de las que 3.908 son hombres (80%) y 1.061, mujeres (20%).
Los cuatro coinciden en señalar que “el relevo generacional de las peñas está garantizado. Hay un montón de txikis en las lista de espera de las peñas, que en muchos casos no pueden hacer nuevos socios” explicó Donlo.
“El relevo generacional está garantizado, hay muchos txikis en lista de espera”
Son conscientes de que el debate social sobre el futuro de las fiestas está ahí y que las peñas, tarde o temprano, tendrán que abordar el futuro de los festejos taurinos como los encierros o las corridas de toros. “Todos los medios preguntan a la Federación sobre este tema, pero la Federación no tiene nada que decir, es una decisión que corresponde a cada peña y creo que ninguna tiene intención de poner el debate encima de la mesa” comentó Iosu Santxez.
“En las peñas hay gente taurina y otros que no lo son. En el momento en el que el sector contrario se imponga se verá, pero de momento todas las peñas, por definición, son taurinas. En cierta forma es la esencia de las peñas, porque si no serían sociedades gastronómicas” apuntó Donlo. La charla se prolongó durante casi una hora, tiempo suficiente para comprobar que las peñas cuentan con muy buen salud y no pocos retos en el horizonte.
